La edil de urbanismo alegó al informe del fiscal que interesa archivar el caso de los altavoces comprados a Jolper sin factura ni consurso alguno
La concejala de Urbanismo, Áurea Soto, reclamó ayer "igualdade de trato para todos" en los juzgados. "Se nós temos que ir pasear toda a xunta de goberno local de 2008 dende o 19 en diante", dijo en referencia a las declaraciones por las presuntas irregularidades en la adjudicación de las obras de Bedoya, "pedimos o mesmo criterio para cando se trata da xunta de goberno de 2006, do PP".
Se refería la concejala socialista al informe del Ministerio Fiscal que interesaba el sobreseimiento de la causa abierta a raíz de su denuncia de la aprobación de la factura presentada por Jolper Música, empresa vinculada al hoy portavoz de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, por un importe de 61.691 euros en concepto de la adquisición de unos altavoces. "É a primeira vez en todas estas instruccións (vinculadas al Concello) que se pediu informe ó fiscal. Gustarianos que se fixera en todas", dijo Soto, en un velado reproche al juez instructor de la causa, el mismo que el de Bedoya, Antonio Piña, contra el que la concejala presentó una recusación.
Así, la concejala ha presentado ya sus alegaciones al informe del fiscal para intentar evitar que el juez archive el caso de los altavoces. En las mismas argumenta que "las irregularidades administrativas resultan tan flagrantes que indiciariamente lo que resulta complicado es que alguno de los denunciados actuase bajo la suposición de hacerlo conforme a Derecho". Insiste en que la junta de gobierno local del PP acordó abonar la factura sin que existiese, "ni existe procedimiento administrativo que ampare la adjudicación del contrato" y sin que "la factura aprobada ni tan siquiera existiese en aquella fecha", puesto que está datada en diciembre de 2006 -la junta de gobierno fue en noviembre de aquel año-. Igualmente destaca que el trabajo abonado -el suministro de las pantallas de sonido- "no se había ejecutado" cuando se pagó la factura.
Soto comparó en todo momento los expedientes de contratación de Bedoya y los altavoces e incluso los trasladó a la rueda de prensa. De hecho, el segundo constaba únicamente de un folio en el que se explica que "non consta ningún expediente en Contratación". Afirmó, además, que mientras en Bedoya se adjudicó por un procedimiento negociado sin publicidad y "o que se discute é se tiña que ser por publicidade", en los altavoces se hizo por adjudicación directa, saltándose "todos os peldaños da lei".
La concejala también explicó que los técnicos municipales analizarán la renuncia del alcalde a la caducidad del expediente sobre el aval de su vivienda y destacó que "nunca o tratamos diferente por ser alcalde".
