La Asociación Internacional Benposteña (Aibem) asegura que la Ciudad de los Muchachos está siendo desmantelada y que el Concello adquirió su Poliedro para instalarlo en Montealegre. El Concello dice que le fue cedido para evitar su demolición.
La antigua Ciudad dos Muchachos está siendo desmantelada en contra de la voluntad de los jóvenes que continúan residiendo en el hotel denominado Benposta.
Así lo aseguran los responsables de la Asociación Internacional Bemposteña (Aibem), que ayer, además, acusaban al Concello de la ciudad de haber adquirido, no sabemos a cambio de qué, el Poliedro para instalarlo en el parque de Montealegre, aseguran.
El colectivo reconoce que Montealegre quizás sea el mejor lugar para lo que fue su escuela de circo, pero debe quedar claro que fue adquirido con el esfuerzo, sacrificio y trabajo de muchos jóvenes que dieron vida al Circo de los Muchachos, añaden.
Este recordatorio es justo lo que quiere el Concello. Al menos según palabras del concejal de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, que reconoce que en la actualidad se está tramitando el traslado de El Poliedro para Montealegre porque pretendemos recuperarlo. Si se queda en Benposta quizás sea demolido cuando se empiece a construir en la zona y esto no lo podemos permitir porque es un símbolo de la ciudad, dijo.
La estructura le fue ofrecida al Concello por el padre Jesús Silva pero no a cambio de ninguna partida económica, porque por lo que cuesta desmontarlo y trasladarlo a Montealegre se puede adquirir perfectamente uno nuevo. Lo cedió y la idea nos pareció buena porque es bonito y puede integrarse perfectamente en el futuro jardín botánico como recuerdo a unos jóvenes que se esforzaron en el mundo del circo, añadió el edil.
Los técnicos municipales revisaron en los últimos días las instalaciones para comprobar que era posible desmontarlo.
Tala de pinos para vender la madera
La Asociación Internacional Bemposteña acusa a los hermanos Jesús y Manuel Silva de estar desmantelando las instalaciones, llegando incluso a talar los pinos que hay en la zona para vender la madera, aseguran, lamentando que ninguna institución sea capaz de parar la corta y el desmantelamiento de la ciudad, máxime cuando el dinero no está siendo utilizado para fines sociales como recogen los estatutos de Benposta, dice.
Así lo aseguran los responsables de la Asociación Internacional Bemposteña (Aibem), que ayer, además, acusaban al Concello de la ciudad de haber adquirido, no sabemos a cambio de qué, el Poliedro para instalarlo en el parque de Montealegre, aseguran.
El colectivo reconoce que Montealegre quizás sea el mejor lugar para lo que fue su escuela de circo, pero debe quedar claro que fue adquirido con el esfuerzo, sacrificio y trabajo de muchos jóvenes que dieron vida al Circo de los Muchachos, añaden.
Este recordatorio es justo lo que quiere el Concello. Al menos según palabras del concejal de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, que reconoce que en la actualidad se está tramitando el traslado de El Poliedro para Montealegre porque pretendemos recuperarlo. Si se queda en Benposta quizás sea demolido cuando se empiece a construir en la zona y esto no lo podemos permitir porque es un símbolo de la ciudad, dijo.
La estructura le fue ofrecida al Concello por el padre Jesús Silva pero no a cambio de ninguna partida económica, porque por lo que cuesta desmontarlo y trasladarlo a Montealegre se puede adquirir perfectamente uno nuevo. Lo cedió y la idea nos pareció buena porque es bonito y puede integrarse perfectamente en el futuro jardín botánico como recuerdo a unos jóvenes que se esforzaron en el mundo del circo, añadió el edil.
Los técnicos municipales revisaron en los últimos días las instalaciones para comprobar que era posible desmontarlo.
Tala de pinos para vender la madera
La Asociación Internacional Bemposteña acusa a los hermanos Jesús y Manuel Silva de estar desmantelando las instalaciones, llegando incluso a talar los pinos que hay en la zona para vender la madera, aseguran, lamentando que ninguna institución sea capaz de parar la corta y el desmantelamiento de la ciudad, máxime cuando el dinero no está siendo utilizado para fines sociales como recogen los estatutos de Benposta, dice.