El diputado del BNG en el Parlamento de Galicia Iago Tabarés insistió en la necesidad de dotar a los procesos electorales de las mínimas garantías democráticas y evitar, de esta forma, actos partidario-institucionales en el exterior como el protagonizado hace unos días por el presidente de la Diputación de Ourense, el popular José Luis Baltar, en Argentina y Uruguay.
En un comunicado, Tabarés reconoció no sentirse sorprendido por el hecho de que Baltar aprovechase dos mítines del PP en Buenos Aires y en Montevideo para rubricar sendos convenios con cargo a los presupuestos de la Diputación de Ourense, según publica 'El País'. No obstante, mostró su temor de que este tipo de eventos que mezclan lo partidario y lo institucional se multipliquen ante la proximidad de las elecciones autonómicas.
Pese a que no son ni novedosas ni sorprendentes, el nacionalista censuró estas actuaciones de intento de manipulación del voto de los residentes en el exterior. Suponen una grave vulneración de las reglas básicas de la democracia así como una administración arbitraria de fondos públicos, denunció.
Después de augurar por experiencia que estos actos tendrán continuidad de aquí a la celebración de los comicios gallegos, preguntó al Gobierno gallego --que conforman PSdeG y BNG-si tiene constancia de lo ocurrido y si va a adoptar algún tipo de medidas para que no se repitan estas actuaciones. A diferencia de lo que ocurrió en procesos electorales precedentes, apostilló.
Asimismo, inquirió a la Xunta sobre si la normativa vigente permite evitar este tipo de comportamientos y qué conocimiento tiene el Gobierno autonómico de las inversiones y las ayudas que conceden a los centros gallegos en el exterior las diferentes entidades locales, de forma especial las diputaciones.
Al respecto, sugirió la necesidad de que exista algún tipo de coordinación en política migratoria entre la Xunta y las instituciones provinciales, que permita una mayor eficiencia en la administración del dinero público y, al mismo tiempo, la mejora de la calidad de vida de los residentes en el exterior.
Pese a que no son ni novedosas ni sorprendentes, el nacionalista censuró estas actuaciones de intento de manipulación del voto de los residentes en el exterior. Suponen una grave vulneración de las reglas básicas de la democracia así como una administración arbitraria de fondos públicos, denunció.
Después de augurar por experiencia que estos actos tendrán continuidad de aquí a la celebración de los comicios gallegos, preguntó al Gobierno gallego --que conforman PSdeG y BNG-si tiene constancia de lo ocurrido y si va a adoptar algún tipo de medidas para que no se repitan estas actuaciones. A diferencia de lo que ocurrió en procesos electorales precedentes, apostilló.
Asimismo, inquirió a la Xunta sobre si la normativa vigente permite evitar este tipo de comportamientos y qué conocimiento tiene el Gobierno autonómico de las inversiones y las ayudas que conceden a los centros gallegos en el exterior las diferentes entidades locales, de forma especial las diputaciones.
Al respecto, sugirió la necesidad de que exista algún tipo de coordinación en política migratoria entre la Xunta y las instituciones provinciales, que permita una mayor eficiencia en la administración del dinero público y, al mismo tiempo, la mejora de la calidad de vida de los residentes en el exterior.