Las Xuventudes Socialistas repartieron profilácticos en varios colegios religiosos de la provincia en diciembre de 1990, llevando el asunto a una polémica que duró más de un mes
Los miembros de Xuventudes Socialistas, con su secretario Santiago Rodríguez al frente, crearon polémica el 15 de diciembre de 1990 al repartir preservativos a las alumnas del colegio religioso Divina Pastora de Ourense dentro de la campaña puesta en marcha por el Ministerio de Asuntos Sociales bajo el slogan “¿Sin preservativos? ¡No jodas!” El reparto fue calificado de “provocación” por los responsables del centro, que presentaron una denuncia por allanamiento de morada.
Dudo que el Ministerio de Sanidad capitaneara hoy una campaña por los preservativo y dudo que las Juventudes Socialistas –suponiendo que aún existan– lo llevaran a cabo con tanta frescura como unos y otros lo hacían en 1990.
Los jóvenes socialistas se pasaron metiéndose en casa ajena, es decir, en el colegio de las Franciscanas, pero el éxito, según las crónicas, fue total. Las jovencitas alumnas aceptaron con risitas nerviosas condones, camisetas y pegatinas con el slogan: “Póntelo, pónselo” y “¿Sin preservativo? ¡No jodas!”.
El caso es que las monjas llamaron a la policía, las APAS y los defensores de centros de enseñanza privados pusieron el grito en el cielo y denuncias en la comisaría. Pero la campaña continuó, los jóvenes le perdieron el miedo al condón, en los siguientes días los adolescentes ourensanos se dividieron en sectores de opinión y manifestaron su opinión sobre el tema por primera vez.