Tráfico propuso a fomento reducir la velocidad en un tramo de la N-525 , el vial que registró más muertos en 2013
Las carreteras nacionales cuyo trazado discurre por la provincia de Ourense fueron las que el pasado año registraron más accidentes, no sólo mortales sino también sin víctimas. En total, según puntualiza el Gobierno en varias respuestas parlamentarias a la diputada socialista Laura Seara, se produjeron 723 siniestros automovilísticos.
Aunque el mayor número de accidentes tuvo lugar en la A-52 (un total de 306), los más graves ocurrieron en la N-525. Basta recordar que de los doce fallecidos en todo el entramado viario de la provincia, incluidas carreteras secundarias, cinco personas perecieron en la N-525 (Banavente-Santiago). Tres de ellas, en dos colisiones en Coles; los otros dos percances mortales ocurrieron en Ríos y en Ourense (atropello), a la altura del hotel San Rosendo.
Precisamente, el tramo que discurre entre Ourense y Coles sigue siendo a día de hoy el más conflictivo de toda la red viaria tal como evidencia el balance lesivo de los accidentes en lo que va de 2014. El último, el 25 del pasado mes cuando Elvira González Pérez, vecina de Ourense de 81 años, murió a consecuencia de un choque frontal con otro vehículo en el kilómetro 243,8 de la N-525, a la altura de O Viso. También resultaba herida grave Lara María López Castro (34 años).
Una vez descartados problemas en el mantenimiento y señalización de los 11 kilómetros que hay entre Ourense y Cambeo, según valoran fuentes de la Jefatura de Tráfico es "óptimo", este organismo ha pasado a proponer alternativas. El jefe provincial de Tráfico, David Llorente, se reunía el pasado miércoles con el jefe de la Demarcación de Carreteras del Ministerio de Fomento, Constantino Pato, según confirmó la Subdelegación del Gobierno, para abordar los problemas de seguridad. Una de las propuestas que quedó sobre la mesa es la opción de estudiar el descenso de la velocidad en las curvas a 70 km por hora (ahora está a 80). Otra alternativa radica en un proyecto de remodelación del tramo suprimiendo el carril lento dirección Santiago.
Deficiente conservación
El mantenimiento de esta y otras carreteras es para algunos colectivos manifiestamente mejorable. Los socialistas creen que existe una relación directa causa-efecto entre el mal estado de los viales en Ourense y el elevado número de accidentes. La diputada Laura Seara habla de "abandono" por parte del Gobierno, y critica la "ridícula" inversión. Así lo demuestra otra respuesta parlamentaria a la propia diputada en la que el Gobierno reconoce que las obligaciones reconocidas para la provincia de Ourense durante 2013 con cargo al proyecto de inversión “Conservación y Explotación de Carreteras” ascendieron solo a 10,6 millones de euros. “Es una cantidad irrisoria” -señala Seara- quien, además, indica que dicha partida de los presupuestos es genérica para toda España y de ella el Estado decide cuánto asigna a cada provincia.
Asociaciones como "Stop Accidentes" en Galicia asegura que la crisis pasó factura al estado de conservación. "El deterioro es cada vez mayor, sobre todo, si hablamos del estado de la calzada y la señalización", asegura uno de sus integrantes, quien prefiere no desvelar su nombre. Entre otros ejemplos, ,menciona el estado de la señales en la N-120, a la altura de Untes (no cumplen los parámetros de reflectividad); los peligrosos surcos en el firme de la A-52, entre Allariz y Sandiás o el estado de pavimentación de la calzada en esa misma autovía en Albarellos y A Gudiña. A su entender, no cabe obviar este déficit en la consecución de accidentes: "Sabemos que el 90% se debe al factor humano pero ese otro 10% restante es imputable al estado del parque de vehículos y el entorno, es decir, el estado de las carreteras".
