Una de las noticias destacadas en el día de hoy, 12 de diciembre, es que el mercado laboral ourensano capta cada vez más trabajadores de otras provincias y que nuestra tierra aún exporta más mano de obra de la que llega, pero logró anotar en el año 2021 el mejor saldo de la última década.
Es una información de doble vertiente, sin duda. Permite corregir un poco el déficit pero confirma que son más los ourensanos que salen que los que deciden apostar por venir. Una de las situaciones que más nos debería hacer pensar es lo difícil que es retener talento. Los que están entre los 30 y los 45 años son muchos más los que se van que los que llegan. Además, son personas con una buena formación, en su mayoría titulados superiores.
Nos persigue sin tregua el fantasma de la emigración y lo peor es que no se percibe el fin del mal fario. Ojalá la situación pueda cambiar. Ante la racionalidad de los números que nos indican que no, siempre se puede poner el impulso de los sentimientos que nos hacen creer que sí.
