"Estamos de acuerdo con la reforma si nos garantizan cabida para todos", dice su presidente
Todo apunta al positivismo en la reforma integral de la Praza de Abastos de la ciudad. En una reunión celebrada ayer, se trató de atender a las necesidades de los comerciantes y buscar soluciones que causen los menores perjuicios posibles para éstos y para los clientes del mercado. Si bien una de las propuestas era rechazar la propuesta de proyecto de reforma, ha sido descartada rotundamente y comienza el plazo para presentar el proyecto final y la documentación necesaria al Ministerio de Fomento, que concedía el pasado jueves, 16 de julio, una partida de 3,6 millones de euros con cargo a los fondos que se generan para el 1,5% Cultural por la contratación de obra pública para la reforma integral de Abastos.
Al encuentro asistieron las tres partes implicadas en el proyecto de reforma. Por un lado, representantes de los comerciantes, encabezados por su presidente, Emilio González, Milucho. Por parte del Concello fueron el alcalde, Jesús Vázquez, los ediles de Comercio e Infraestructuras, Isabel María Castelo y José Araújo, y una arquitecta los que acudieron a la reunión. Y también Alfredo Freixido, autor del anteproyecto de remodelación, también estuvo presente.
PREOCUPACIÓN DE COMERCIANTES
El regidor explicó a este periódico que por parte del gobierno "vamos a poner todo de nuestra mano para satisfacer a las necesidades y peticiones de todos". Una de las principales preocupaciones de los empresarios de la Praza de Abastos es el traslado de su actividad durante los dos años estimados para la reforma. En este sentido, ayer mismo, apuntó Vázquez, se aprobó en xunta de goberno local una modificación presupuestaria que incluye una partida de hasta 600.000 euros para esa primera fase del realojo "y dar seguridad a los afectados". Uno de los espacios posibles para el emplazamiento es la Alameda que, siendo viable, "hay que estudiarlo bien para no causar daños a terceros", añadió Jesús Vázquez. Otro de los puntos tratados en la reunión fue el futuro de los comerciantes y puestos ya existentes. El presidente, Emilio González, manifestó que "estamos de acuerdo con el proyecto si nos garantizan que el nuevo edificio tiene cabida para todos". En respuesta a este planteamiento, el alcalde garantizó a los empresarios que la reforma del mercado municipal no afectará en cifras a los cien locales comerciales y las 275 personas.
Con todo, está previsto para este jueves, 23 de julio, una asamblea general de los comerciantes en la que individualmente expondrán sus aportaciones al proyecto de remodelación. A esta reunión está prevista la asistencia del alcalde, "para que atienda a las necesidades de cada uno de nosotros", explica el presidente.
DOS FASES DE PROYECTO
El proyecto está dividido en dos fases. La primera recoge la reforma del edificio en sí: estructura diáfana, instalación de climatizador radiante, accesos, zona de despachos, aseos públicos y zona de duchas para los operarios, principalmente. Llegado este punto comenzará la construcción de cada uno de los puestos. "Ahí habrá que llegar a acuerdos dependiendo de las características de cada uno", apuntó Jesús Vázquez, porque, añadió, "habrá módulos que tengan que ser más grandes que otros", siendo el mínimo de siete metros cuadrados. Como estaba previsto, el "rianxo" no está incluido en la reforma y el edificio central contará con cuatro plantas: un sótano de 1.665 metros destinados a área comercial, las dos existentes de 947 metros cada una y un último piso con una terraza dedicada al ocio de 594 metros.
