Las alegaciones de un sindicato les convierte en "víctimas colaterales" de una "guerra política"
Los comerciantes de la ciudad han vuelto a poner el grito en el cielo. Si a principios de semana un posible retraso en las luces de Navidad –que se empezaron a colocar ya ayer– aumentó la tensión, ayer explotaron tras conocer que un sindicato había bloqueado sus convenios. Se sienten rehenes de la "guerra política" y resumen la situación así: "unos por otros y la casa sin barrer".
El sindicato de la policía local SPPME presentó alegaciones esta semana contra gran parte las modificaciones de crédito que habían sido aprobadas por el pleno del Concello de Ourense. Entre ellas, la que va destinada a pagar el convenio del comercio, paralizando así la subvención de 39.000 euros hasta que los técnicos resuelvan y se vuelva a llevar a pleno el asunto.
Ante esta decisión, la Federación de Comercio y los centros comerciales abiertos Ourense Centro, Couto Centro y Ourense Norte están hondamente preocupados y mostraron ayer su "indignación", creyendo ser "víctimas colaterales de una guerra política que ni nos va ni nos viene".
Sin entrar al ataque contra el sindicato policial, le piden que mediten lo que está en juego, y no dudan en recordarles hechos del pasado: "Cuando el Gobierno central retiró la paga extra de Navidad a los funcionarios, la respuesta de Ourense Centro fue contundente y rotunda, posicionándonos totalmente en contra de esa medida".
Esperan que se piense en el "bien de la ciudad", recalcando que los convenios de las distintas asociaciones de comerciantes se destinan a "dinamización, con lo que eso supone para Ourense y su visibilidad". Como ejemplos de eventos que dependen de las ayudas destacan Gala Calpurnia, ShoppingNight o A Noite Branca. "Queremos pensar que todos nos pondremos las pilas para sacar esto adelante", señalan estas asociaciones.
Los comerciantes reciben desde 2016, a través de un convenio, una ayuda con cargo al presupuesto municipal. Este colectivo recuerda que este dinero, 39.000 euros, supone una "parte ridícula" del montante total de las cuentas públicas.
Opinión del concello
La concejala de Facenda, Ana Morenza, señaló que se puede generar un perjuicio a los comerciantes, y cargó contra el sindicato de funcionarios que presentó alegaciones: "Solo les importan ellos mismos y sus prebendas". Cree Morenza que esta central sindical actúa de forma "deshonesta" y muestra su sorpresa por que hayan decidido bloquear la ayuda al pequeño comercio. "Hay que reflexionar sobre cuáles son los motivos por los que solo recurren ese convenio", dijo, recordando que los sociales o culturales se salvaron de la quema.
Aún así, pidió que no haya preocupación: "Seguiremos trabajando para sacarlo adelante. Están intentando bloquear porque en los tribunales no están consiguiendo nada".
