Las asociaciones locales creen que el balance se equiparará, a lo sumo, a los resultados de 2013.
Las asociaciones de comerciantes de Ourense coinciden en temerse lo peor con respecto a las cifras de facturación de las rebajas de este año y consideran que las buenas perspectivas detectadas en Navidad "fueron un espejismo que no ha tenido continuidad en estos dos primeros meses del 2014", según afirma Luis Rivera, presidente del Centro comercial aberto Ourense Centro.
A la espera de tener "resultados contrastados y el dato de la comparativa con otras provincias", la eliminación del calendario cerrado y tradicional de rebajas" se está revelando como malo para los comercios", según señala el presidente de la Federación de Comercio, Aurelio Gómez Villar.
En el mismo sentido se expresa el presidente del Centro comercial aberto O Couto, Julio Prol, que reconoce que "nosotros nos habíamos creado unas ciertas expectativas porque desde el verano se había registrado un leve repunte de las ventas", pero las impresiones "que he recogido entre los asociados apuntan a que la facturación no se parecerá a la que nos esperábamos".
Prol añade que "no tienen nada que ver las ventas que registramos ahora con las que teníamos hace tres o cuatro años, en plena crisis", y anticipa que "nos moveremos en cifras como las del año pasado, que fueron notablemente más bajas que las de hace tres años".
Desde la Federación de Comercio de Ourense se apunta que, "como mucho, lo que esperamos es que se repitan las cifras del año pasado, no el repunte de ventas que habíamos vaticinado", explica Aurelio Gómez Villar.
Luis Rivera, responsable del Centro comercial aberto Ourense Centro, recuerda que "el año pasado bajaron un 2 % las ventas con respecto al 2011" y este año "se esperaba subir las ventas alrededor de un 3 %", pero, por el contrario, "creo que ni siquiera alcanzaremos las cifras de venta del 2013".
Para Rivera, la razón principal está en que "se rompió el calendario tradicional" con fecha de comienzo de la temporada de rebajas el 6 de enero, Día de Reyes, "con lo que se perdió el efecto llamada al consumidor, como ya habíamos avisado. Lo mejor sería un calendario cerrado, este nuevo sistema de libertad total para poner las rebajas les restan relevancia", coincide Gómez Villar.n
