Los cinco alcaldes unen fuerzas frente a las exenciones tributarias de las que disfrutan las prisiones

Los concellos gallegos con cárceles pretenden compensaciones por el impacto de los penales

La prisión de Pereiro. En el interior cumplen condena más de medio millar de personas. (Foto: Xesús Fariñas)
Los alcaldes gallegos con centros penitenciarios en su territorio -los de Curtis (A Coruña), A Lama (Pontevedra), Monterroso y Outeiro de Rei (Lugo), además del de Pereiro de Aguiar acordaron unir fuerzas para reclamar al Gobierno una compensación eco nómica por esas instalaciones. Los regidores están elaborando un estudio del dinero que dejan ingresar por los penales, que están exentos de impuestos como el bienes inmuebles y la contribución. Por contra, aseguran que le ocasionan gastos y crean mala imagen.
Ni un sólo euro ingresaron hasta el momento las arcas municipales de Pereiro de Aguiar desde que fue abierto el Centro Penitenciario, el único que hay en la provincia y bautizado con el nombre del municipio. Pero no es sólo este caso, la situación se repite en los cuatro municipios gallegos que tienen penales: Curtis (A Coruña), A Lama (Pontevedra), Monterroso y Outeiro de Rei, en Lugo, dado que las instalaciones están exentas de pagar impuestos.

Los regidores no pretenden cambiar la legislación y que a partir de ahora contribuyan a las arcas municipales pagando contribución rústica, impuesto de bienes inmuebles (IBI) e incluso tasas cuando realizan alguna obra de mejora o actividades varias. ‘Lo que pedimos es una compensación económica por acoger este tipo de instalaciones en el territorio’, afirmó el primer teniente de alcalde de Pereiro de Aguiar, Manuel Doval.

La luz corre por cuenta de Instituciones Penitenciarias, igual que el abastecimiento de agua, que suele ser de una captación propia con pozos. Lo que no pagan es por el saneamiento y depuración. En el caso del penal de Monterroso, el Concello acaba de ‘adjudicar un proyecto para que las tuberías de abastecimiento y saneamiento lleguen a las instalaciones’, explicó el primer teniente de alcalde, Darío Rodríguez.

Los cinco alcaldes plantearon su iniciativa al conselleiro de Administracións Públicas y Xustiza, Xosé Luis Méndez Romeu, y el paso siguiente ‘será ir a Madrid y abordar el tema con los responsables de Instituciones Penitenciarias. ‘Además de no pagar impuestos, los penales crean una mala imagen del municipio’, aseguró el alcalde de A Lama, Jorge Canda, quien ya se reunió en varias ocasiones con jueces y fiscales para que no prolonguen los permisos a los presos hasta las doce de la noche. ‘A esa hora no funciona el transporte público y muchos de ellos lo primero que hacen es robar un coche. Esta también es una situación de inseguridad que vienen soportando los vecinos’, añadió.

El regidor no dejó pasar por alto el número de presos que se fugaron en los últimos años ‘algunos de ellos peligrosos y con el consiguiente riesgo para la población’, recalcó.

Los penales, a mayores, ocasionan gastos. ‘Hay que mantener limpios los accesos, recoger basura y conservar el entorno’, explicó Manuel Doval.

A Lama ya pleiteó
Los regidores tienen previsto llamar a las puertas de la Federación Galega de Municipios y Provincias (FEGAMP) para que los apoye en su reivindicación, que tienen previsto pleitear, de no fructificar las negociaciones, en la Justicia. ‘Acabo de ganarles un pleito a Instituciones Penitenciarias, que tiene que abonar 25.000 euros por licencias para realizar reformas. Adjudican proyectos y no cuentan para nada con el Concello’, aseguró el alcalde de A Lama, Jorge Canda. La compensación que reclaman los regidores también incluye a la población reclusa ‘porque son ciudadanos que están residiendo en el municipio. No pretendemos censarlos, pero es justo que percibamos una compensación por ellos porque somos los que le prestamos servicios. Al preguntarle donde residen afirman que en Pereiro y no en su concello, que es el que recibe dinero por ellos de la Administración’, apuntó Manuel Doval. Instituciones Penitenciarias declinó pronunciarse hasta conocer la propuesta.

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