Un hombre ha sido condenado por la Audiencia de Ourense a 10 años de prisión por violar a la hija de su antigua pareja. Además, la Audiencia de Ourense le ha prohibido acercarse a la víctima y a su domicilio, así como comunicarse con la adolescente durante 12 años.
El tribunal considera probados los hechos relatados por la denunciante. El acusado recogió a la menor en la madrugada del pasado 2 de marzo de 2022 en la localidad de Viana do Bolo, durante la celebración de las fiestas del entroido en la comarca de Monterrei.
Su madre le había encomendado llevarla hasta su domicilio. No obstante, el encausado le sugirió tomar una última copa en el bar que regentaba, cerrado ya a esas horas al público. Según recoge la sentencia, la víctima accedió a esta proposición.
El condenado preparó dos copas en el local y, tras probar la suya, la agredida se quedó dormida. La Sala asegura que al recuperar el conocimiento, la expareja de su madre le pidió que se sentara con él, y, "aprovechándose del estado en el que se encontraba", la agredió sexualmente.
Conocía a la víctima perfectamente
Los jueces afirman en la sentencia que el procesado había convivido con la progenitora de la menor entre los años 2014 y 2021, con la que además tiene dos hijos en común. Debido a ello, "existía un fuerte vínculo afectivo y de confianza, a pesar de que su relación se rompió en el año 2021".
La Sala resalta en la sentencia que el testimonio de la víctima es "claro y digno de crédito", al tiempo que asegura que "aparece corroborado por las pruebas documental, pericial y testifical practicadas".
La fiscal y el padre de la menor reclamaban 12 años de cárcel para el procesado, mientras que la madre solicitaba ocho. La resolución no es firme y podría recurrirse ante el TSXG.
