El ex gestor del castillo de Maceda, Ignacio Palomanes, y su madre han sido condenados por el Juzgado de Instrucción 1 de Ourense a una multa de 180 euros cada uno por una falta de desobediencia leve. Los hechos se remontan a 2007 cuando el Concello acordó en Pleno rescindirle la concesión, obligándole a entregar las llaves y desalojar el castillo, lo que no se produjo hasta dos meses después. El alcalde y los policías que custodiaron el castillo quedaron absueltos de coacciones. Palomanes recurrirá.
La situación que vivió el castillo de Maceda entre octubre y diciembre de 2007 a raíz del acuerdo plenario del Concello en el que se acordó la rescisión de la concesión al gestor Ignacio Palomanes por presuntas irregularidades en la gestión ya cuenta con pronunciamiento judicial.
Tras la negativa de Ignacio Palomanes a entregar las llaves del castillo y el encierro voluntario de su madre en la fortaleza, que el Concello contrarrestó impidiendo la entrada de terceras personas al recinto instalando una cadena en la puerta de acceso y colocando vigilancia policial, Concello y concesionario se enfrascaron en un cruce de denuncias. La familia Palomanes denunció al alcalde de Maceda, Xabier Oviedo, y a los policías locales de Allariz y Maceda por coacciones, mientras que el regidor denunció a Ignacio Palomanes y a su madre, Celsa Rodríguez, por desobediencia.
180 euros
El Juzgado de Instrucción 1 de Ourense asumió todas estas denuncias en un mismo juicio de faltas. La sentencia (no firme), que acaba de darse a conocer, condena a Palomanes y a su madre a una pena de 30 días de multa a razón de 6 euros por día cada uno por una falta de desobediencia leve. El juez entiende que la legalidad de la que en principio está revestida la decisión del Pleno le imprime fuerza obligatoria a la decisión de rescindir la concesión y desalojar el castillo. En base a ello, señala que la conducta del gestor y de su madre al negarse a entregar las llaves y abandonar el recinto es desobediente, teniendo en cuenta, además, que se le notificó en debida forma la decisión del Pleno y se le requirió para que hiciera entrega de las llaves.
La sentencia absuelve al alcalde de Maceda y a los policías locales que custodiaron el castillo de las coacciones que denunciaba la familia Palomanes. El juez entiende que la actitud del regidor estaba amparada por una resolución administrativa imbuida de la necesaria legalidad, reforzada, además, por una orden judicial posterior que ordenaba el desalojo del castillo. Asimismo, entiende que los agentes policiales se limitaron a cumplir órdenes del alcalde, sin el empleo de violencia ni excediéndose en sus funciones.
Apelación
El regidor municipal de Maceda, el nacionalista Xabier Oviedo, mostró ayer su satisfacción ante los términos en los que se pronuncia el titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ourense. Quedamos absoltos tanto eu como os policías de Maceda e Allariz que estiveron no exterior do castelo aqueles días, o que demostra que estabamos actuando como deberiamos, señaló.
Menos palabras tuvo ayer el ex concesionario del castillo de Maceda. Ignacio Palomanes, declinó, hacer ningún tipo de valoración sobre la sentencia que le condena tanto a él como a su madre por una falta leve de desobediencia y que todavía no es firme. No obstante, confirmó su intención de recurrirla y aseguró que ya estaba preparando el recurso de apelación.
Entre los agentes policiales involucrados en este conflicto, se encontraban dos policías locales de Maceda y tres de Allariz.
Tras la negativa de Ignacio Palomanes a entregar las llaves del castillo y el encierro voluntario de su madre en la fortaleza, que el Concello contrarrestó impidiendo la entrada de terceras personas al recinto instalando una cadena en la puerta de acceso y colocando vigilancia policial, Concello y concesionario se enfrascaron en un cruce de denuncias. La familia Palomanes denunció al alcalde de Maceda, Xabier Oviedo, y a los policías locales de Allariz y Maceda por coacciones, mientras que el regidor denunció a Ignacio Palomanes y a su madre, Celsa Rodríguez, por desobediencia.
180 euros
El Juzgado de Instrucción 1 de Ourense asumió todas estas denuncias en un mismo juicio de faltas. La sentencia (no firme), que acaba de darse a conocer, condena a Palomanes y a su madre a una pena de 30 días de multa a razón de 6 euros por día cada uno por una falta de desobediencia leve. El juez entiende que la legalidad de la que en principio está revestida la decisión del Pleno le imprime fuerza obligatoria a la decisión de rescindir la concesión y desalojar el castillo. En base a ello, señala que la conducta del gestor y de su madre al negarse a entregar las llaves y abandonar el recinto es desobediente, teniendo en cuenta, además, que se le notificó en debida forma la decisión del Pleno y se le requirió para que hiciera entrega de las llaves.
La sentencia absuelve al alcalde de Maceda y a los policías locales que custodiaron el castillo de las coacciones que denunciaba la familia Palomanes. El juez entiende que la actitud del regidor estaba amparada por una resolución administrativa imbuida de la necesaria legalidad, reforzada, además, por una orden judicial posterior que ordenaba el desalojo del castillo. Asimismo, entiende que los agentes policiales se limitaron a cumplir órdenes del alcalde, sin el empleo de violencia ni excediéndose en sus funciones.
Apelación
El regidor municipal de Maceda, el nacionalista Xabier Oviedo, mostró ayer su satisfacción ante los términos en los que se pronuncia el titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ourense. Quedamos absoltos tanto eu como os policías de Maceda e Allariz que estiveron no exterior do castelo aqueles días, o que demostra que estabamos actuando como deberiamos, señaló.
Menos palabras tuvo ayer el ex concesionario del castillo de Maceda. Ignacio Palomanes, declinó, hacer ningún tipo de valoración sobre la sentencia que le condena tanto a él como a su madre por una falta leve de desobediencia y que todavía no es firme. No obstante, confirmó su intención de recurrirla y aseguró que ya estaba preparando el recurso de apelación.
Entre los agentes policiales involucrados en este conflicto, se encontraban dos policías locales de Maceda y tres de Allariz.
