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El consumo de agua en la ciudad cae 980 litros por persona en tres meses

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photo_camera Fuente en Rabo de Galo, prácticamente seca.

El plan contra la sequía del Concello de Ourense y Viaqua da los primeros frutos, con un 7% menos de consumo el pasado mes

La situación de sequía se toma un respiro en la ciudad y las campañas de sensibilización, así como la actitud de la ciudadanía, empiezan a notarse en el consumo de agua. Desde el mes de septiembre se han gastado 103.000 metros cúbicos menos (103 millones de litros) en el servicio de abastecimiento de agua en Ourense respecto al mismo periodo del año anterior, lo que supone una bajada media del 4,6% y equivale a 41 piscinas olímpicas, según los datos facilitados por la empresa que gestiona el suministro de agua, Viaqua.

Cada ourensano ha reducido el consumo en 980 litros de agua en septiembre, octubre y noviembre. El Concello de Ourense lanzó a principios de octubre un plan contra la sequía, basado en la reducción de consumo de las fuentes ornamentales, y la reducción de baldeos nocturnos y el riego de parques y jardines. Noviembre fue el primer mes completo desde la implantación del plan, y el consumo se ha reducido en un 7% respecto al mismo mes de 2016.

En el plan lanzado en colaboración con Viaqua el pasado 9 de octubre, se marcaban como objetivo la reducción de una piscina olímpica diaria, 2.500 metros cúbicos al día y, por lo que parece, pese a no alcanzar la cifra exactamente, esta se acerca bastante a las previsiones.

Viaqua ha llevado a cabo una reducción sectorial en la presión nocturna en algunas zonas concretas con reductoras electrónicas de presión. De momento, el abastecimiento para la ciudad de Ourense está totalmente garantizado, como ha asegurado en repetidas ocasiones la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS).

De hecho, respecto a las medidas aplicadas por el Concello de Ourense, el presidente de la CHMS, Francisco Marín, no dudó en resaltar que "son medidas que pueden ayudar; todo lo que sea apoyar la reducción del consumo es positivo", Marín mantiene que "no creo que nos veamos en problemas de abastecimiento", haciendo mención también a las predicciones americanas, que apuntan a lluvias cuantiosas a partir del 15 de diciembre.

Fuerte subida de las mínimas

De momento, las lluvias siguen sin hacer acto de presencia, aunque las predicciones de Meteogalicia indican que el agua aparecerá en Ourense la noche del jueves al viernes, aunque de forma tímida y sin previsiones de ser continuadas, algo que es lo que se necesita para poder paliar la situación. Lo que sí se notará es un incremento progresivo de las temperaturas en los próximos días, con una incidencia importante en las mínimas.

Los datos de lluvias del presente año hidrológico, que arrancó el pasado 1 de octubre, siguen sin levantar cabeza. Desde el mes de octubre. La precipitación acumulada ha sido de 118,6 l/m2, un 63% por debajo de la media histórica, siendo esta de 318 l/m2.

Los datos son muy negativos respecto al promedio histórico, pero cobran todavía mayor sentido si se comparan con el año hidrológico 2016/2017, que ya fue extremadamente malo, y que desembocó en la declaración de "alerta por sequía".

En noviembre del año pasado, la precipitación registrada era de 169,4 l/m2, lo que supone un 43 % por encima de lo que se ha registrado hasta ahora. 

La Xunta evalúa la posibilidad de entrar en situación de "emergencia"

La conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, afirmó ayer que aunque "la emergencia" por sequía en Galicia "no es una realidad a día de hoy", es "una posibilidad" que la Xunta evalúa. La situación de alerta declarada el pasado lunes en la demarcación Galicia-Costa ha derivado en que toda la comunidad autónoma se encuentre en esta situación, ya que la demarcación Miño-Sil y la Confederación Hidrográfica del Duero llevan tiempo así. 

"La meteorología no nos acompaña, pero habrá que seguir el protocolo escrito", puntualizó Mato. A partir de ahora, la Xunta seguirá con contactos y reuniones. "Lo primero de todo para informar de cuál es la situación real de sus ríos y de sus embalses, y lo siguiente mantener reuniones de carácter periódico". 

La Xunta realizará a partir de ahora un seguimiento "más estrecho, más allá de colaborar con todo aquel que lo necesite para agilizar las autorizaciones o hacer alguno que otra toma de agua".

PLAN DE SEQUÍA, DESDE 2013

Asimismo, la titular de Medio Ambiente recordó el Plan de la Sequía aprobado en el año 2013,  "un trabajo hecho hace mucho tiempo, cuando en Galicia no se hablaba de la posibilidad de tener sequía". 

Por último, Mato añadió que actualmente, la Xunta está "concretando estas infraestructuras y esa hoja de ruta con lo que hay que hacer y quién lo tiene que hacer". 

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