Que la crisis se refleja en la basura que generamos no es ninguna novedad. Que con los problemas económicos se ha acentuado la búsqueda en los contenedores, tampoco. Pero, además de los orgánicos, en los últimos meses, la empresa concesionaria del servicio en la ciudad, Ecourense, percibe un especial interés por el contenido de los contenedores de papel, sobre todo en busca de cartón. 'De momento no es tanto lo que te quiten, es que de esta manera pueden estropear el contenedor (dado que tienen que abrirlo porque no tienen tapa), que vale unos 800 euros', explican en la empresa.
Las cifras no son aún definitivas porque la recogida de estos residuos en la ciudad se mueve en cifras altas (1.225 toneladas de papel el año pasado), pero sí se ha notado una disminución. También en Aspanas, que realiza la recogida selectiva de papel y cartón, han tenido que tomar una serie de medidas para evitar ver disminuida de forma considerable la cantidad de material.
'Claro que notamos una reducción en la entrada de papel en la nave, por eso muchos proveedores ya no lo sacan a la calle y no se lo dan a nadie hasta que vayamos nosotros', dice Maruxa Román, que, sin embargo, entiende que 'el problema es que la gente pasa mucha necesidad aunque nuestros chicos (con discapacidad intelectual) tampoco tienen otro modo de vida'.
'Claro que notamos una reducción en la entrada de papel en la nave, por eso muchos proveedores ya no lo sacan a la calle y no se lo dan a nadie hasta que vayamos nosotros', dice Maruxa Román, que, sin embargo, entiende que 'el problema es que la gente pasa mucha necesidad aunque nuestros chicos (con discapacidad intelectual) tampoco tienen otro modo de vida'.
