La Guardia Civil de Ourense eleva a diez los detenidos en el marco de la operación Larimar para desmantelar un grupo organizado especializado en asaltos violentos en viviendas. Hubo tres redadas simultáneas en la ciudad, otra más en Taboadela, así como en Pontevedra y Barcelona. En esta última ciudad tuvo lugar el último arresto, que se dio a conocer ayer.
No todos los detenidos en un primer momento siguen en esa misma situación. La Guardia Civil dejó en libertad ya el miércoles al vecino del registro de la calle Zurbarán, en O Couto. Pese a que su abogado estuvo en la Comandancia hasta las 18,30 horas, no fue informado de que pocas horas después iban a dejar al detenido en libertad. Los agentes registraron su piso del número 18 de la calle Zurbarán, pero no llegaron a intervenirle los coches que utiliza él y su esposa.
El resto de implicados, pasarán hoy a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción 1 de Ourense.
Durante las redadas realizadas de forma simultánea, la Guardia Civil buscó las armas empleadas en los atracos, las joyas y el dinero de los supuestos botines.
Registros en Ourense
Una redada llevada a cabo de forma simultánea en Ourense, Taboadela, Pontevedra y Barcelona permitió desarticular un grupo criminal que estaba especializado en robos con violencia e intimidación. Los agentes entraron de forma simultánea en las diferentes viviendas que registraron tanto en la provincia ourensana como en el resto.