Aumentaron las apropiaciones indebidas y las estafas derivadas de las dificultades económicas
La apertura del curso judicial 2015-2016 en la sede del Tribunal Supremo destapó la realidad delictiva que llegó a los juzgados el pasado año a través de la Memoria de la Fiscalía General del Estado. El vasto documento, dividido en dos tomos, desgrana los datos y claves del funcionamiento de todos los aspectos relacionados con la actividad de los fiscales en la provincia.
En 2014, las diligencias previas por delitos y faltas que entraron en los juzgados de la provincia, tal como revela la memoria divulgada ayer, cayeron un 17,3% con respecto a 2013. Los juzgados incoaron 18.923 casos (en 2013, casi 23.000) aunque no todos llegaron a juicio. Más de 11.000 se sobreseyeron y 989 se archivaron definitivamente, principalmente por la falta de autor conocido.
Tal como ocurriera en el periodo precedente, hubo más denuncias relativas a la corrupción política y en las administraciones, esto es, delitos contra la Administración Pública. Prueba de ello son las 31 diligencias previas por prevaricación administrativa -un 14,8% más que en 2013-, además de una querella por malversación y dos por tráfico de influencias.
Efectos de la crisis
Asimismo, aumentaron las denuncias por apropiación indebida y estafas atribuidas la mayor parte a personas sin antecedentes que pasan por un mal momento económico, según valoran jueces de instrucción consultados por este diario: hubo 268 (en 2013, fueron 196) y 956 (10 más), respectivamente . Un caso curioso fue el incremento de delitos relacionados con la defraudación del fluido eléctrico ya que aumentaron un 55,6%, pasando de nueve casos a 14.
Por contra, descendieron las diligencias por hurto (4.330 en la provincia); los robos con fuerza (2.005); las sustracciones en casas habitadas o establecimientos comerciales (288) y los robos con intimidación (197).
En total, se tramitaron 10.459 diligencias por delitos contra el patrimonio, un 12,8% más que en 2013.
En el capítulo contra el orden público, hubo más delitos relacionados con la tenencia ilícita de armas: 14 denuncias por tenencia de armas sin permiso (escopetas) y seis por estar en posesión de armas prohibidas. Asimismo, aparece por primera vez en los últimos años una causa por apología del terrorismo.
En Ourense, los delitos contra el patrimonio, especialmente los hurtos, junto a las lesiones son las infracciones del Código Penal más recurrentes. Estas últimas sumaron 4.762, incluidas las producidas en el ámbito de la violencia doméstica y de género (516 frente a las 493 de 2013).
