La comisión no cuenta con el apoyo de la asociación del barrio a dos semanas del inicio de los festejos
La celebración de las fiestas de A Ponte, en su día consideradas como las mejores de la ciudad por muchos ourensanos, corren peligro. A escasas dos semanas del inicio de los festejos, la comisión no cuenta con el aval de la asociación vecinal de A Ponte, documento imprescindible por la nueva ley de contratación para dar luz verde a la organización. "A lei non permite que as persoas físicas fagan contratos, teñen que estar apoiados pola entidade veciñal", explica Mario González, concejal de Cultura. Hace varios días, González y un técnico municipal se reunieron con los dos integrantes de la comisión para valorar la situación e intentar buscar soluciones. "Dixéronnos que hai desavenencias entre a directiva da asociación e a os organizadores. Nós intentamos facer algún contacto, a modo de intermediarios, pero foi imposible", asegura el concejal de Cultura.
Por su parte, José Manuel Cabaleiro, miembro de la comisión, prefiere no pronunciarse sobre la falta de apoyo de la asociación vecinal. "Eu niso non me meto, pero é unha vergoña que os responsables da asociación non solucionen este tema e que non haxa festas", reclama. Cabaleiro y su compañero Roberto Decabo organizarían este año la celebración por tercer año consecutivo, después de que en 2017 tomasen las riendas. "O Concello e a asociación son os únicos que agora mesmo poden decidir algo sobre a celebración, a nós non nos importa deixar de estar na comisión, pero non queremos que os veciños se queden sin as súas festas", añade. No obstante, Olga Giráldez, presidenta de la asociación vecinal, asegura que la entidad "apoya por completo" los festejos: "Nosotros no recibimos ninguna propuesta formal para reunirnos con los miembros de la comisión, por eso todavía no se ha firmado ningún papel. Siempre hemos colaborado".
El paso de los días complica aún más la organización
El paso de los días también complica las fiestas pontinas, ya que el tiempo se echa encima para la contratación de servicios de seguridad, electricidad, espectáculos y barracas. "Eu estoulle dicindo aos feriantes que me chaman preguntando que presenten a documentación en Cultura, por si ao final se fan as festas, así xa teñen todo listo, pero é que é moi tarde xa... Está claro que si se fai algo non vai estar a altura do que merecen os veciños", comenta José Manuel Cabaleiro. Por su parte, Olga Giráldez asegura que si ya es tarde para buscar soluciones"no es nuestra culpa": "Yo dije el año pasado, cuando se acabaron las fiestas, que había que empezar ya a organizar... Y no supimos nada de ellos todavía".
