Un hombre fue detenido por atracar a punta de navaja una cafetería de la ciudad en la que se había pasado varias horas jugando a una máquina tragaperras. Según fuentes próximas a la investigación, el arrestado jugaba en compañía de otra persona y salió en varias ocasiones del local, supuestamente para retirar dinero de un cajero automático. Finalmente, se dirigió a la camarera y, esgrimiendo una navaja, le obligó a darle 350 euros. Tras declarar en el juzgado, el detenido quedó en libertad.
Asombrada se quedó la camarera de una cafetería de la ciudad cuando un hombre se dirigió a ella y, mostrándole una navaja, le obligó a darle el dinero de la caja, alrededor de 350 euros. Lo sorprendente del caso es que, según fuentes de la investigación, el supuesto atracador se había pasado horas jugando a una máquina tragaperras del establecimiento, junto a otro hombre. Según afirmaron los testigos a los investigadores, las horas de juego incluyeron varias salidas del local, presuntamente para ir al cajero de una entidad bancaria en busca de más dinero para seguir jugando.
Problemas
En un momento dado, uno de los hombres se acercó a la barra y atracó a la camarera, que le dio el dinero bajo la amenaza de que, si no lo hacía, la pincharía. El otro hombre que había estado jugando, asombrado, dejaba claro desde la máquina tragaperras que no tenía nada que ver con el atraco y que desconocía las intenciones del supuesto atracador, mostrando incluso su intención de salir en búsqueda del que había sido su compañero de juego. Poco tiempo después, el presunto atracador fue detenido por la Policía. El hombre, que responde a las iniciales B.S.F., no tiene antecedentes judiciales ni había sido arrestado en ninguna otra ocasión.
Ayer por la mañana pasó a disposición judicial y declaró en el juzgado de guardia que tiene problemas de adicción, tanto al juego como al alcohol, y que se asustó al quedarse sin dinero por las consecuencias que podría tener en la economía familiar (dado que, según dijo, tiene dos hijos), por lo que supuestamente se habría decidido a atracar la cafetería para recuperar el dinero que había perdido en el juego.
Tras escuchar su declaración, la fiscal solicitó que el acusado ingresara en prisión al tener en cuenta como agravante que el atraco se había producido utilizando un instrumento peligroso (navaja). No obstante, al no contar con antecedentes penales y policiales el arrestado, el juez decidió dejarlo en libertad, a la espera de que se celebre el juicio.
Problemas
En un momento dado, uno de los hombres se acercó a la barra y atracó a la camarera, que le dio el dinero bajo la amenaza de que, si no lo hacía, la pincharía. El otro hombre que había estado jugando, asombrado, dejaba claro desde la máquina tragaperras que no tenía nada que ver con el atraco y que desconocía las intenciones del supuesto atracador, mostrando incluso su intención de salir en búsqueda del que había sido su compañero de juego. Poco tiempo después, el presunto atracador fue detenido por la Policía. El hombre, que responde a las iniciales B.S.F., no tiene antecedentes judiciales ni había sido arrestado en ninguna otra ocasión.
Ayer por la mañana pasó a disposición judicial y declaró en el juzgado de guardia que tiene problemas de adicción, tanto al juego como al alcohol, y que se asustó al quedarse sin dinero por las consecuencias que podría tener en la economía familiar (dado que, según dijo, tiene dos hijos), por lo que supuestamente se habría decidido a atracar la cafetería para recuperar el dinero que había perdido en el juego.
Tras escuchar su declaración, la fiscal solicitó que el acusado ingresara en prisión al tener en cuenta como agravante que el atraco se había producido utilizando un instrumento peligroso (navaja). No obstante, al no contar con antecedentes penales y policiales el arrestado, el juez decidió dejarlo en libertad, a la espera de que se celebre el juicio.
