Dos menores de 16 años de Celanova fueron detenidos por la Guardia Civil como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas al introducir hachís en el colegio Sagrado Corazón de la villa, en el que cursan estudios.
Los arrestos se produjeron en la jornada del jueves después de que la directora del centro educativo se percatara de la presencia de la droga en el interior de la mochila de uno de los alumnos. El hallazgo alarmó a la profesora, pero ésta optó por no llamar la atención de los estudiantes y evitar cualquier tipo de polémica que conllevara que el dueño de la mochila se deshiciera de la sustancia estupefaciente. Eso sí, tras salir de clase, alertó a la Guardia Civil que, acto seguido, estableció un dispositivo de vigilancia en torno al colegio, en el que medio millar de alumnos cursan estudios de Infantil, Primaria y Secundaria.
Los agentes detuvieron el jueves a uno de los menores al intervenirle pequeños trozos de hachís en el interior de la mochila en que llevaba los libros. Según pudo saber este periódico, la droga estaba repartida en dos pequeños envoltorios de papel de aluminio para consumir cada trozo en lo que se conoce como un 'porro'.
El estudiante negó que el hachís fuera suyo, aunque no supo acreditar su procedencia, alegando que posiblemente un compañero se lo había metido en su mochila mientras estaba jugando.
Los agentes continuaron con las pesquisas en torno al centro escolar y en la mañana de ayer arrestaban al otro menor, al intervenirle durante un registro 15 pequeños trozos de hachís entre los libros. En este caso, el estudiante también negó que la droga fuera de su propiedad.
La Guardia Civil, que ayer declinó ofrecer detalles sobre los arrestos al tratarse de menores de edad, continúa con la investigación, según pudo saber este periódico, para determinar la procedencia de la droga e identificar a las personas que se la vendieron a los estudiantes con objeto de introducirla en el colegio para su posterior venta o consumo entre el alumnado.
Los profesores ya venían sospechando desde principios del mes de octubre de que alumnos podrían estar fumando hachís durante el recreo y al salir del colegio. Los estudiantes fueron puestos ayer a disposición de la Fiscalía de Menores que, tras tomarles declaración, los dejó bajo la custodia de sus padres. Este periódico no pudo contactar ayer con la directora del centro educativo.
Los agentes detuvieron el jueves a uno de los menores al intervenirle pequeños trozos de hachís en el interior de la mochila en que llevaba los libros. Según pudo saber este periódico, la droga estaba repartida en dos pequeños envoltorios de papel de aluminio para consumir cada trozo en lo que se conoce como un 'porro'.
El estudiante negó que el hachís fuera suyo, aunque no supo acreditar su procedencia, alegando que posiblemente un compañero se lo había metido en su mochila mientras estaba jugando.
Los agentes continuaron con las pesquisas en torno al centro escolar y en la mañana de ayer arrestaban al otro menor, al intervenirle durante un registro 15 pequeños trozos de hachís entre los libros. En este caso, el estudiante también negó que la droga fuera de su propiedad.
La Guardia Civil, que ayer declinó ofrecer detalles sobre los arrestos al tratarse de menores de edad, continúa con la investigación, según pudo saber este periódico, para determinar la procedencia de la droga e identificar a las personas que se la vendieron a los estudiantes con objeto de introducirla en el colegio para su posterior venta o consumo entre el alumnado.
Los profesores ya venían sospechando desde principios del mes de octubre de que alumnos podrían estar fumando hachís durante el recreo y al salir del colegio. Los estudiantes fueron puestos ayer a disposición de la Fiscalía de Menores que, tras tomarles declaración, los dejó bajo la custodia de sus padres. Este periódico no pudo contactar ayer con la directora del centro educativo.
