La única integrante femenina de la formación, natural de La Habana (Cuba), además de ser una de las voces principales de Bambolea, es la gerente de su propia empresa fundada en el año 2006.
¿Cuándo decides fundar la orquesta y por qué en Ourense?
Cuando me casé me mudé a esta ciudad. En ese momento tenía en mente dejar la verbena para dedicarme a otras cosas, pero me di cuenta que lo que realmente quería era estar sobre el escenario, por eso fundé mi propia empresa.
¿Cómo puedes compaginar tu trabajo de gerente y, a la vez, ser vocalista?
Cuando solo tienes que desempeñar el papel de cantante dispones de todo el tiempo para preparar tus canciones y bailes; yo también tengo que estar pendiente de los arreglos, infraestructura, asistir a reuniones, organizar el repertorio y los ensayos, llevar la contabilidad... hay que tenerlo todo bien medido. No es un trabajo nada fácil, pero es satisfactorio cuando recoges los frutos.
¿Hacia dónde tienes pensado enfocar la próxima temporada?
Mantendremos el concepto de orquesta de baile que nos caracteriza, pero también intentaremos incluir algo de espectáculo para aportar más dinamismo a la formación, así como ampliar el equipo de sonido y trabajar más la iluminación del escenario.
