La Semana Santa comenzó en la ciudad con una misa en la Catedral oficiada por el obispo Leonardo Lemos con el aforo reducido, a diferencia del pasado año cuando se ofició sin feligreses, pero sin el tradicional paso del "borriquito".
El Domingo de Ramos se volvió a celebrar el la ciudad, adaptándose a las nuevas normativas sanitarias. Los fieles pudieron asistir a la misa oficiada por el obispo Leonardo Lemos, quien se encargó de bendecir los ramos. Pese a que la eucaristía pudo contar con público, la ceremonia no pudo contar con el Paso de los Niños, más conocido como el de la "borriquita" que recorrería las calles desde el San Lázaro hasta la Catedral.
Los más pequeños, luciendo con orgullo sus palmas, pero también los más mayores con sus ramos de laurel y olivo no fallaron con este "tradicional" día, como lo define Manuel Costa, uno de los asistentes. Leonardo Lemos inició la bendición de los ramos desde el Pórtico del Paraíso, desfilando por los pasillos de la nave de la Catedral, otra de las novedades de este año. Antes del comienzo, se avisó a los feligreses que no se moviesen de sus asientos, donde estaban sentados de forma individual mínimo a un metro y medio.
Lemos recordó la Semana Santa de 2020, emitida en línea y cerrada a cal y canto, por lo que agradeció “que este año podamos tener algunos fieles dentro de este templo”. A Jesús, durante el sermón, le pidió que “nos libere de esta pandemia, una realidad que está azotando nuestro mundo”. Para los niños tuvo un mención especial en esta jornada: "Lamento que por las normas sanitarias no podáis estar en torno a la imagen de Jesús subido a la borriquilla como en otros años".
Experiencias a medias
Laura Cúbides, quien se instaló en la ciudad hace dos años, no pudo vivir aún un Domingo de Ramos tradicional, pero se alegra de poder acudir a misa en esta ocasión: "Soy muy católica y el año pasado no se vivió igual la Semana Santa, que se permita algo más esta vez, muestra que estamos avanzando en esta pandemia". El paso de la "borriquita", algo que espera poder vivir "pronto".
Lo "importante" de la Semana Santa es ir a misa, según Rosa Garrido, otra de las asistentes, por lo que dice estar "contenta" de vivir la celebración religiosa otra vez en los templos. Manuel Costa, no dudó en fallar con esta cita: "Aproveitamos que nos deixan entrar na igrexa e a procesión, xa se verá cando se fará".
Durante el acto litúrgico se leyeron los episodios de la Pasión de Cristo que dan sentido a la Semana Santa. El miércoles volverá a celebrar una nueva misa en la catedral a las 19,00 horas para seguir con la programación prevista para esta semana, que también se podrá seguir a través de las redes sociales.
