El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, anunció que el nuevo dron de la Dirección General de Tráfico (DGT) operará en septiembre en Ourense. La provincia será la última a la que llegue la “gran novedad” de la campaña de verano en el tráfico gallego, después de haber trabajado ya en el resto de Galicia.
Miñones destacó que los puntos de actuación son “siempre tramos de carreteras de alto riesgo de accidentes y con mayor concentración de usuarios vulnerables”. La principal misión de este dron es “detectar infracciones de riesgo, como conductas temerarias, adelantamientos imprudentes, no usar el cinturón de seguridad o usar el móvil”. Por ejemplo, el miércoles registró infracciones por no respetar un stop, usar el móvil y no usar el cinturón.
El objetivo es “aportar seguridad” a las carreteras gallegas, en las que este año se han registrado 44 víctimas mortales en 40 accidentes. Son ocho víctimas menos que a estas alturas de 2019, pero el delegado recordó que el objetivo es no tener ninguna.
