Un mayor grado de especialización, más competencias y aumento del personal en los turnos para evitar sobrecargas, sobre todo en el Complexo Hospitalario. Estas son, a grandes rasgos, las demandas básicas del sector de la Enfermería en Ourense a la nueva Consellería de Sanidade, dirigida por la popular Pilar Farjas.
Con la aplicación del Plan Bolonia, los estudios de Enfermería pasarán de la diplomatura actual (tres años) a ser una licenciatura de grado (cuatro años). Esta circunstancia ha reavivado la demanda histórica de este colectivo profesional, que pide un mayor desarrollo de su carrera. La presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Ourense, Ascensión Pérez Sampayo, recalca que el nuevo Gobierno autonómico debe adaptar sus políticas de recursos humanos a esta circunstancia -si bien reconoce que la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas, cuenta con experiencia acreditada en este ámbito-, otorgando mayores competencias a los enfermeros en el sistema sanitario, tradicionalmente centralizado en la figura del médico.
Habría que especializar más a los enfermeros, pues de otro modo no se aprovecharía la racionalización del gasto sanitario -explica Ascensión Pérez- ya que no es operativo tener a un médico destinado exclusivamente a expedir recetas y formar a un enfermero es demasiado caro como para no sacarle provecho.
Cifras insuficientes
En la provincia, ejercen esta profesión 2.000 enfermeros colegiados, una cifra insuficiente para el alto número de población jubilada (40.000 personas en diez años), la que más demanda los servicios de Enfermería. Desde la comisión de centro del Complexo Hospitalario y de la junta de personal de Atención Primaria y Atención Especializada, los sindicatos Satse y UGT recalcan que la Consellería de Sanidade debe plantear de forma urgente la mejora de la situación laboral de los trabajadores de la Enfermería. Es por ello que piden la exención de guardias para los profesionales mayores de 55 años y el incremento de personal.
Detectan los sindicatos sobrecarga de trabajo en los turnos de las plantas quirúrgicas del CHOU, Ginecología y Digestivo, sobre todo, así como en los turnos de noche de todo el hospital. Advierten que dicha sobrecarga, además de suponer un problema para el trabajador, se traduce también en la atención al paciente, ya que dispone de menos tiempo para cada uno.
La falta de enfermeros también es una reivindicación en el Centro de Transfusión de Galicia (en los puntos de la provincia y en sus unidades móviles), así como en los centros de salud, donde solicitan servicios de Fisioterapia y matrona en todas las cabeceras de comarca. También existe déficit de estos profesionales en el 061, donde los enfermeros han de realizar tareas administrativas porque este servicio carece de personal específico en la provincia. Por último, el sindicato Satse en la provincia alerta de que el pago del transporte por atención domiciliaria (a pacientes que no tienen la movilidad suficiente para desplazarse a los centros de salud) resulta insuficiente, ya que apenas supone 30 euros mensuales para los enfermeros que se desplazan.
Dos centros de salud sin licitar
Adecuar las plantillas sanitarias a las cargas de trabajo. A esta premisa básica que solicitan los sindicatos Satse y UGT se le suman otras demandas que afectan directamente a la sanidad ourensana, pero ya no de forma específica al sector de la Enfermería, sino al personal sanitario en general.
Todos los sindicatos coinciden en la necesidad de revisar en profundidad los servicios privatizados (citación telefónica, mantenimiento y lavandería) para paliar las deficiencias actuales y, de ser necesario, que vuelvan a incluirse en el sistema público. La continuación del Plan Director del CHOU es otra de las demandas históricas a la Consellería de Sanidade, así como la reposición del material obsoleto e implantar el turno de tarde en los quirófanos, para optimizar los recursos y contribuir de este modo a aliviar las listas de espera, con hasta ocho meses.
Por último, otra de las demandas esgrimida por los represen tantes del personal sanitario en la provincia se basa en agilización de la construcción de los centros de salud de O Couto y O Vinteún (aún sin licitación de los proyectos), así como el acondicionamiento de los Puntos de Atención Continuada, continuando en estos centros con el incremento de plazas previsto en el Plan Mejora. Asimismo, para los centros de salud y PACs solicitan la presencia de guardias de seguridad, para evitar posibles incidentes.
Habría que especializar más a los enfermeros, pues de otro modo no se aprovecharía la racionalización del gasto sanitario -explica Ascensión Pérez- ya que no es operativo tener a un médico destinado exclusivamente a expedir recetas y formar a un enfermero es demasiado caro como para no sacarle provecho.
Cifras insuficientes
En la provincia, ejercen esta profesión 2.000 enfermeros colegiados, una cifra insuficiente para el alto número de población jubilada (40.000 personas en diez años), la que más demanda los servicios de Enfermería. Desde la comisión de centro del Complexo Hospitalario y de la junta de personal de Atención Primaria y Atención Especializada, los sindicatos Satse y UGT recalcan que la Consellería de Sanidade debe plantear de forma urgente la mejora de la situación laboral de los trabajadores de la Enfermería. Es por ello que piden la exención de guardias para los profesionales mayores de 55 años y el incremento de personal.
Detectan los sindicatos sobrecarga de trabajo en los turnos de las plantas quirúrgicas del CHOU, Ginecología y Digestivo, sobre todo, así como en los turnos de noche de todo el hospital. Advierten que dicha sobrecarga, además de suponer un problema para el trabajador, se traduce también en la atención al paciente, ya que dispone de menos tiempo para cada uno.
La falta de enfermeros también es una reivindicación en el Centro de Transfusión de Galicia (en los puntos de la provincia y en sus unidades móviles), así como en los centros de salud, donde solicitan servicios de Fisioterapia y matrona en todas las cabeceras de comarca. También existe déficit de estos profesionales en el 061, donde los enfermeros han de realizar tareas administrativas porque este servicio carece de personal específico en la provincia. Por último, el sindicato Satse en la provincia alerta de que el pago del transporte por atención domiciliaria (a pacientes que no tienen la movilidad suficiente para desplazarse a los centros de salud) resulta insuficiente, ya que apenas supone 30 euros mensuales para los enfermeros que se desplazan.
Dos centros de salud sin licitar
Adecuar las plantillas sanitarias a las cargas de trabajo. A esta premisa básica que solicitan los sindicatos Satse y UGT se le suman otras demandas que afectan directamente a la sanidad ourensana, pero ya no de forma específica al sector de la Enfermería, sino al personal sanitario en general.
Todos los sindicatos coinciden en la necesidad de revisar en profundidad los servicios privatizados (citación telefónica, mantenimiento y lavandería) para paliar las deficiencias actuales y, de ser necesario, que vuelvan a incluirse en el sistema público. La continuación del Plan Director del CHOU es otra de las demandas históricas a la Consellería de Sanidade, así como la reposición del material obsoleto e implantar el turno de tarde en los quirófanos, para optimizar los recursos y contribuir de este modo a aliviar las listas de espera, con hasta ocho meses.
Por último, otra de las demandas esgrimida por los represen tantes del personal sanitario en la provincia se basa en agilización de la construcción de los centros de salud de O Couto y O Vinteún (aún sin licitación de los proyectos), así como el acondicionamiento de los Puntos de Atención Continuada, continuando en estos centros con el incremento de plazas previsto en el Plan Mejora. Asimismo, para los centros de salud y PACs solicitan la presencia de guardias de seguridad, para evitar posibles incidentes.
