Mientras Ourense está a la espera de que se seleccione el diseño de su futura estación ferroviaria (que será elegido por jurado a través de un concurso público, convocado por Fomento el pasado 12 de mayo), Vigo, A Coruña y Lugo ya conocen cómo serán sus futuras terminales ferroviarias.
Así, la primera ciudad gallega en la que se desveló el diseño de la futura estación fue Vigo, que se conoció el pasado febrero, para el que se había contratado al prestigioso arquitecto norteamericano Thom Mayne en 2008, por 6,6 millones de euros. La estación estará en el mismo lugar que la actual, aunque las vías se ubicarán a 15 metros de profundidad, ya que la entrada de la línea irá soterrada. Las obras de la estación tendrá un presupuesto de 69 millones de euros, a los que hay que sumar otros 112 millones para viales, aparcamiento (1.350 plazas), un centro comercial Vialia con 180 locales y la estación de autobuses, entre otras.
PRESTIGIO
En A Coruña se resolvió en mayo el concurso para escoger el proyecto. Con unanimidad del jurado, se eligió la propuesta de otro autor de prestigio: el pontevedrés César Portela, junto a la consultora Idom. Ahora tendrá dos años para redactar el proyecto, por 6,2 millones de euros. Posteriormente se iniciará la construcción de la futura terminal (con un plazo de obra de 24 meses), que incluye el edificio ferroviario, un aparcamiento, una estación de autobuses y un vial de conexión transversal, con un coste de 106 millones. En una segunda fase (cuyo proyecto no forma parte de este concurso), se construirá un centro comercial Vialia, un edificio para oficinas y un hotel, por 76 millones.
Mientras, la estación de Lugo no tendrá diseñador de renombre, ya que el proyecto ha sido elaborado por una unión de empresas integrada por Eptisa Servicios de Ingeniería, Junquera Arquitectos y Calter Ingeniería, por un importe notablemente inferior a los anteriores (de 627.000 euros). Los autores de la idea tendrán ahora 27 meses para elaborar el proyecto de construcción y, posteriormente, se adjudicarán las obras de la terminal, cuyo coste será de 13 millones de euros.La estación se levantará donde se encuentra la actual y unirá las dos partes de la ciudad que ahora se encuentran separadas por la vía del tren. Integrará, asimismo, la estación de autobuses y contará con un aparcamiento subterráneo.
Mientras, Santiago -al igual que Ourense- está pendiente de que se resuelva el concurso para el diseño del edificio. En este caso, el proyecto de la intervención costará 2,3 millones de euros y el coste máximo de la obra será de 35 millones.
En términos económicos, el proyecto de la estación de A Ponte será intermedio a los citados. De hecho, el proyecto tendrá un coste de cuatro millones de euros, mientras que la ejecución no podrá superar los 67,5 millones, según ha establecido Fomento. La obra incluirá la nueva terminal de autobuses, un edificios para el puesto de mando y oficinas, un vial entre la calle Xesús Pousa y Río Arnoia y una plaza sobre las vías. Así, la inversión en Ourense se sitúa así por debajo de A Coruña y Vigo (aunque éstas incluyen un complejo comercial), pero supera a Santiago y Lugo.
PRESTIGIO
En A Coruña se resolvió en mayo el concurso para escoger el proyecto. Con unanimidad del jurado, se eligió la propuesta de otro autor de prestigio: el pontevedrés César Portela, junto a la consultora Idom. Ahora tendrá dos años para redactar el proyecto, por 6,2 millones de euros. Posteriormente se iniciará la construcción de la futura terminal (con un plazo de obra de 24 meses), que incluye el edificio ferroviario, un aparcamiento, una estación de autobuses y un vial de conexión transversal, con un coste de 106 millones. En una segunda fase (cuyo proyecto no forma parte de este concurso), se construirá un centro comercial Vialia, un edificio para oficinas y un hotel, por 76 millones.
Mientras, la estación de Lugo no tendrá diseñador de renombre, ya que el proyecto ha sido elaborado por una unión de empresas integrada por Eptisa Servicios de Ingeniería, Junquera Arquitectos y Calter Ingeniería, por un importe notablemente inferior a los anteriores (de 627.000 euros). Los autores de la idea tendrán ahora 27 meses para elaborar el proyecto de construcción y, posteriormente, se adjudicarán las obras de la terminal, cuyo coste será de 13 millones de euros.La estación se levantará donde se encuentra la actual y unirá las dos partes de la ciudad que ahora se encuentran separadas por la vía del tren. Integrará, asimismo, la estación de autobuses y contará con un aparcamiento subterráneo.
Mientras, Santiago -al igual que Ourense- está pendiente de que se resuelva el concurso para el diseño del edificio. En este caso, el proyecto de la intervención costará 2,3 millones de euros y el coste máximo de la obra será de 35 millones.
En términos económicos, el proyecto de la estación de A Ponte será intermedio a los citados. De hecho, el proyecto tendrá un coste de cuatro millones de euros, mientras que la ejecución no podrá superar los 67,5 millones, según ha establecido Fomento. La obra incluirá la nueva terminal de autobuses, un edificios para el puesto de mando y oficinas, un vial entre la calle Xesús Pousa y Río Arnoia y una plaza sobre las vías. Así, la inversión en Ourense se sitúa así por debajo de A Coruña y Vigo (aunque éstas incluyen un complejo comercial), pero supera a Santiago y Lugo.
