Tanto Rodríguez como Soto y el exedil Sánchez Vidal aseguran que "peligraba una subvención"
El interrogatario a los imputados por la adjudicación de las obras de Bedoya (un procedimiento negociado, urgente y sin publicidad) continuó ayer con la comparecencia ante el juez de Instrucción 1, Leonardo Álvarez, del exalcalde de la ciudad, Francisco Rodríguez, la concejala de Urbanismo, Áurea Soto, y el exteniente alcalde del BNG, Alexandre Sánchez Vidal (hay nueve políticos encausados).
El que fuera alcalde cuando a finales de 2008 se encomendó la obra a OCA S.A. salió en defensa de la junta de gobierno que aprobó el procedimiento, un asunto que introdujo el entonces edil de Infraestructuras, Andrés García Mata, en el orden del día con carácter urgente. "Creo que la junta de gobierno tiene la convicción total y absoluta de que obró con criterio de responsabilidad, sobre todo para evitar que se perdiera una subvención importante, y si hubo alguna irregularidad administrativa, lo mejor era que lo advirtieran en aquel momento y no ahora", aclaró Rodríguez tras comparecer ante el juez.
Ante este último aseguró que García Mata le explicó que había que "resolver el tema urgentemente para evitar la pérdida de una cantidad importante de dinero". Aclaró que el edil no les dijo que en la documentación no iba el informe jurídico pero que dio por supuesto que iba incorporado.
Asimismo, dijo que había tenido conocimiento de la adjudicación a OCA S.A. cuando empezaron las obras porque "el servicio de Infraestructuras y el concejal son los que deciden realizar una invitación, según los criterio de idoneidad".
Rodríguez también aclaró al juez que los reparos del interventor llegaron cuando ya "se estaba empezada" la obra (con el pago de la primera factura) y se preguntó cómo no se hizo antes. Más aún, a preguntas de su letrado, añadió que "el interventor tenía conocimieto de todo el procedimiento antes del reparo y no hizo ninguna advertencia".
Por su parte, Áurea Soto abundó en el mismo argumento y la carencia de informes que aludieran a algún tipo relación entre las tres empresas con las que se contactó desde Infraestructuras (OCA, su filial Betunes y Firmes en UTE con Orenga y Opain . Tal como dijo a su salida del juzgado, "no existe ningún informe que indique que hubiera algún tipo de problema". También salió en en defensa de García Mata enfatizando que su único propósito fue "no perder una subvención".
Por su parte, el exteniente de alcalde, el nacionalista Alexandre Sánchez Vidal, el último en declarar, defendió la aprobación del expediente para hacer "una obra de la Xunta fiscalizada por la propia Xunta". "Aprobamos un expediente hecho por el asesor jurídico del Ayuntamiento que tenía el beneplácito de los técnicos municipales", manifestó Sánchez Vidal, quien afirmó sentirse desconcertado con su imputación en este caso.
Sánchez Vidal puso sobre la mesa el volumen de asuntos que van en el orden del día de una junta de gobierno a la hora de refrendar la confianza de los ediles en que van bien documentados: "100 expedientes en menos de una hora".
