El campamento urbano que desarrolla el Concello de Piñor desde hace ocho años se ha visto mermado en participación durante esta última edición debido a la retirada de la subvención que concedía para tal fin la Xunta de Galicia.
Esta circunstancia obligó al grupo de gobierno, que preside el socialista Francisco José Fraga Civeira, a poner una cuota mensual de 35 euros a cada niño, aunque también contempló descuentos para aquellas familias con menos recursos económicos. No obstante, hasta ahora el campamento era totalmente gratuito ya que la ayuda de la Administración autonómica cubría gastos y aún completaba el sueldo de la educadora familiar contratada por el Concello.
En año anteriores, la media de participación era entre 20 y 25 niños, pero en esta ocasión se redujo drásticamente a tan solo cinco menores debido a la cuota impuesta.
Pese a ello, el campamento se desarrolló con una amplia programación de actividades, incluyendo desde talleres ocupacionales lúdicos y juegos hasta andainas y competiciones deportivas. También se impartieron clases de refuerzo escolar.
A la vista de la situación, el Concello de Piñor asumió el coste de algunas iniciativas que ofreció de forma totalmente gratuita, entre ellas un taller de teatro y dos excursiones lúdicas y formativas, una de ellas al municipio de Rianxo, a la que se sumaron 40 jóvenes.
Otra de las iniciativas puestas en marcha durante la acampada tuvo una finalidad solidaria, recaudar alimentos para las familias con menos recursos económicos. El año pasado, los niños decidieron recabar fondos para la asociación de lucha contra el alzheimer, pero en esta ocasión acordaron, por iniciativa propia, organizar una campaña de recogida de alimentos para entregar a las familias de bajos recursos de su propio municipio. De esta forma, escribieron y ensayaron una obra de teatro y un baile tradicional que llevaron a escena ante un concurrido público, que supo apreciar el esfuerzo de los menores. Así, consiguieron reunir más de 100 kilos de alimentos y artículos destinados a bebés, ya sea de alimentación o de aseo, entre otros, porque la campaña incidía precisamente en las necesidades de los más pequeños.
TRECE FAMILIAS
El departamento de Servizos Sociais tienen registradas 13 familias en el municipio que están pasando dificultades económicas, según apuntaba la directora del campamento, la educadora familiar Tania Rodríguez. En este caso los beneficiarios han sido cinco de esas familias, todas ellas con niños menores de cinco años.
El alcalde, Francisco Fraga, aseguraba que 'non houbo máis remedio que cobrar o campamento porque non nos podemos endeudar', mientras la educadora recordaba la importancia de reunir a los niños, 'porque hai aldeas nas que sólo hai dous rapaces'.
En año anteriores, la media de participación era entre 20 y 25 niños, pero en esta ocasión se redujo drásticamente a tan solo cinco menores debido a la cuota impuesta.
Pese a ello, el campamento se desarrolló con una amplia programación de actividades, incluyendo desde talleres ocupacionales lúdicos y juegos hasta andainas y competiciones deportivas. También se impartieron clases de refuerzo escolar.
A la vista de la situación, el Concello de Piñor asumió el coste de algunas iniciativas que ofreció de forma totalmente gratuita, entre ellas un taller de teatro y dos excursiones lúdicas y formativas, una de ellas al municipio de Rianxo, a la que se sumaron 40 jóvenes.
Otra de las iniciativas puestas en marcha durante la acampada tuvo una finalidad solidaria, recaudar alimentos para las familias con menos recursos económicos. El año pasado, los niños decidieron recabar fondos para la asociación de lucha contra el alzheimer, pero en esta ocasión acordaron, por iniciativa propia, organizar una campaña de recogida de alimentos para entregar a las familias de bajos recursos de su propio municipio. De esta forma, escribieron y ensayaron una obra de teatro y un baile tradicional que llevaron a escena ante un concurrido público, que supo apreciar el esfuerzo de los menores. Así, consiguieron reunir más de 100 kilos de alimentos y artículos destinados a bebés, ya sea de alimentación o de aseo, entre otros, porque la campaña incidía precisamente en las necesidades de los más pequeños.
TRECE FAMILIAS
El departamento de Servizos Sociais tienen registradas 13 familias en el municipio que están pasando dificultades económicas, según apuntaba la directora del campamento, la educadora familiar Tania Rodríguez. En este caso los beneficiarios han sido cinco de esas familias, todas ellas con niños menores de cinco años.
El alcalde, Francisco Fraga, aseguraba que 'non houbo máis remedio que cobrar o campamento porque non nos podemos endeudar', mientras la educadora recordaba la importancia de reunir a los niños, 'porque hai aldeas nas que sólo hai dous rapaces'.
