Aunque la nieve se mantiene en zonas altas, la central de Velle vuelve a liberar una gran cantidad de agua.
Las intensas precipitaciones de estos días han provocado el regreso de la estampa favorita del temporal: la de la central de Velle abriendo sus compuertas.
La nieve no ha alcanzado a la ciudad pero el mes de febrero se despide con otro ascenso de los niveles del Miño, después de que haya alcanzado un caudal récord hace escasas dos semanas, cuando publicamos que la presa liberaba casi una piscina olímpica por segundo.
Los copos de nieve se mantienen, sin embargo, en las zonas altas de la provincia, como Manzaneda.
