El Ministerio Público abrió diligencias informativas ante las quejas de los facultativos del CHOU

El fiscal investigará carencias denunciadas por los pediatras

Las cosas continúan sucediendo después de pasar.
Aquel 7 de diciembre de 2009, célebre por el colapso que ese día se produjo en el área de Urgencias Pediátricas del CHOU, está en alguna medida detrás de la decisión del Ministerio Fiscal de abrir diligencias informativas para tratar de averiguar qué ocurre en ese servicio. Pasillos y salas de espera saturados, que obligaron a esperas de hasta cinco horas, con más de 40 niños aguardando su turno, ejercieron de última gota en el vaso, antes de que los pediatras que realizan guardias adoptasen dos decisiones determinantes. Primero, presentar una queja ante el Valedor do Pobo, y segundo, detallar ante la Fiscalía de Menores una situación 'frente a la que ya no podemos hacernos responsables, dato todo el trabajo que se nos encomienda', señala una fuente de Pediatría del CHOU. Precisamente esta semana, el Ministerio Público les comunicó a los pediatras que abre diligencias informativas.

La carga de trabajo en horario de guardia es 'insoportable', lamentan, porque sólo entre dos pediatras 'están obligados a atender dos unidades de cuidados intensivos, una de niños prematuros y otra de niños mayores; los partos que se produzcan durante la guardia y sus incidencias; cuatro plantas de hospitalización, y, por si fuera poco, las urgencias que llegan de toda la provincia al hospital'. Todo el trabajo de la pediatría ourensana, según esta fuente, recae a partir de las seis de la tarde en los pediatras de guardia. Es una situación 'singular' respecto al resto de Galicia, donde las 'urgencias son independientes de la guardia hospitalaria'. Porque todo ello puede 'perjudicar la salud de los menores', y porque 'consideramos que es un agravio comparativo, decididos informar a la Fiscalía de Ourense'.

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