Pese a que un juez no apreció indicios delictivos, pretende una condena

El fiscal jefe de la Audiencia de Ourense insiste en su persecución a tres policías

Florentino Delgado. (Foto: XESÚS FARIÑAS)
Los magistrados de la sección segunda de la Audiencia provincial volverán, una vez más, a tener sobre la mesa el asunto de las pretendidas injurias al comisario de Policía que el fiscal jefe de la Audiencia, Florentino Delgado Ayudo, aprecia en unas críticas sindicales. Y ello pese a que el juez que instruyó la denuncia ya falló este verano a favor de los agentes, al no apreciar infracción penal por la que deban ser penados.
Pero Delgado Ayuso insiste con denuedo para que se condene a tres dirigentes del Sindicato Unificado de Policía (SUP) -José Manuel Sánchez (secretario del Comité Ejecutivo Nacional), José Freire (dirigente del sindicato en Galicia) y Roberto González (secretario provincial)- por una falta de injurias al comisario Ángel Barrera cuando en un contexto de crítica sindical tacharon al dirigente policial de 'cobarde' y 'traidor'. Al principio, incluso intentó que el proceso fuese tramitado por delito, una pretensión que incluso rechazó la Audiencia provincial.

Ahora, en su escrito de apelación ante el máximo órgano judicial ourensano, el fiscal jefe de Ourense reclama que se revoque el fallo absolutorio y se les imponga una pena de 15 días de multa a razón de 10 euros al día así como una indemnización de 9.000 euros por daños morales al considerar que 'el escrito injurioso tuvo una gran difusión a nivel nacional'.

El fiscal, en su recurso, no da credibilidad a las manifestaciones de los tres agentes, quienes en el juicio negaron el ánimo injurioso a la hora de elaborar su escrito.

Delgado Ayuso alega que no comparte el criterio del juez de instrucción de que la intención de ese escrito tuviera una intención informativa y de opinión y, sí por contra, la de injuriar.


ORIGEN

El origen del pleito está en un comunicado que los sindicalistas hicieron público por la apertura de un expediente -que intentaron frenar pidiéndoselo, sin éxito, al comisario de Ourense- a dos compañeros (fueron suspendidos cuatro días de empleo y sueldo) por un servicio en Santiago durante la visita del Papa.

El fiscal jefe insiste en que el tono 'burlesco del escrito', al que se le dio publicidad (este diario se hizo eco del asunto), erosiona la institución policial. Y, de cara a una nueva valoración de la prueba, reclama a la Audiencia una vista en laque los tres policías denunciados declaren de nuevo.

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