El inculpado, en su declaración judicial, llegó a manifestar que no entendía por qué intentó matar a su compañera.
El Juzgado de lo Penal 2 de Ourense aplazó al 10 de diciembre la vista oral para enjuiciar a Óscar M.R., de 30 años, por un delito de malos tratos aunque tanto el fiscal como la acusación particular intentaron, durante la tramitación, que el proceso desembocara en una acusación por tentativa de asesinato (el inculpado intentó ahogar a su novia con una bolsa de plástico). Pero las acusaciones se tomaron de bruces con una decisión de la Audiencia provincial que no esperaban.
El máximo órgano jurisdiccional de la provincia estimó el recurso de apelación del letrado de Óscar M.R. y revocó el auto de sumario dictado por el Juzgado de Instrucción 3 de la ciudad, obligando a la jueza a seguir el proceso por un procedimiento abreviado. Esto último comportaba que se podría acusar por lesiones en el ámbito doméstico pero no por una tentativa de asesinato a su expareja sentimental. O lo que es lo mismo, una petición de condena que podría suponer siete años de prisión quedó reducida a una solicitud de un año y tres meses y una orden de alejamiento y comunicación con la víctima durante cinco años. Una pena que en caso de ser condenado tan siquiera cumpliría porque carece de antecedentes.
El inculpado -quien estuvo en prisión provisional por estos hechos-, sobre las dos y media de la madrugada del 16 de abril de 2013, según recoge el escrito de calificación del ministerio público, aprovechando que su pareja estaba dormida "se puso encima de ella intentando con ambas manos taponarle la nariz y la boca al tiempo que trataba de introducirle una bolsa de plástico". A consecuencia de este incidente, la mujer sufrió lesiones leves para cuya curación requirió asistencia facultativa.
El letrado del inculpado reclamará en el juicio la libre absolución o subsidiariamente una condena por una falta en base a la "escasa entidad de las lesiones". Según su tesis, los hechos no se pueden encuadran en un delito de violencia de género "porque las circunstancia que concurrieron no lo acreditan". Según el letrado, ambos, la víctima y el agresor, estaban bajo las influencias de sustancias estupefacientes (habían fumado hachís) y la realidad "puede estar distorsionada".
Declaración del inculpado
El inculpado, en su declaración judicial, llegó a manifestar que no entendía por qué intentó matar a su compañera. Su abogado alude al gran estrés que estaba padeciendo el joven por la depresión que sufría ella desde hacía tiempo, agravada desde el nacimiento de su hijo.
El juez del Penal aplazó ayer la vista por la ausencia de policías. El letrado de la acusación particular aprovechó la presencia del magistrado para verbalizar su disconformidad con el hecho de que este caso no llegase a juicio a la Audiencia, órgano al que compete enjuiciar los delitos más graves como las tentativas de asesinato.
