El fiscal pide expulsar a un senegalés que reside en la ciudad por abusos sexuales

Ourense. 15/10/2018. Juzgado de Ourense en el que se  empiezan a realizar horas extras para recuperar el trabajo atrasado durante la huelga.
Foto: Xesús Fariñas
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“Se acercó a mi prima por detrás y le agarró el culo. Cuando le pedimos que se fuera, la llamó puta y le dijo que no tenía necesidad de violarla porque podía pagarse una puta”. Así describió ayer un testigo en el Juzgado de lo Penal 2 de Ourense los hechos por los que se juzgó a Khalifa A.N., acusado de abusos sexuales, un delito por el que ya fue condenado el 8 de octubre de 2019, por lo que en caso de ser hallado culpable concurriría la agravante de reincidencia.

Este ciudadano senegalés con residencia legal en España se encontraba, según el escrito de la acusación pública, en un pub de los Vinos a las 4.10 de la madrugada del 1 de julio de 2021. Aquella noche “se acercó por detrás a la víctima, que estaba bailando, agarrando con ánimo lascivo las nalgas de esta con sus manos para a continuación echar con idéntica intención la mano hacia su entrepierna, no consiguiendo su propósito al conseguir apartarse rápidamente la joven”, señaló la Fiscalía.

“Se lo hizo también a otra chica. Vi que estaba en apuros y le ofrecí una mano por si necesitaba ayuda y ella la aceptó”, declaró la víctima, oculta tras un biombo.

"Sentimos miedo"

El encausado, que se rio mientras declaraban la joven y un testigo, negó los hechos, y se justificó diciendo que había bastante gente en el local. Afirmó que el primo de la víctima le había pegado y aseguró que, aunque había tomado alguna copa, estaba lúcido. Su abogado defensor, en cambio, solicitó la atenuante de embriaguez y presentó un documento según el cual el denunciado ha estado a tratamiento por alcoholismo.

“Intentaron echarlo fuera del local. Estaba muy agresivo y dijo que todas las mujeres son unas putas y que no tenía necesidad de violar a mi prima. Sentimos miedo y llamamos a la Policía, que llegó justo cuando se estaba quitando la camiseta para iniciar una pelea y nos amenazaba”, aseguró este testigo, también protegido por un biombo. El enjuiciado señaló, en cambio, que fue él quien llamó a la Policía.

El fiscal solicita para Khalifa A.N. una pena de tres años de prisión y, tras cumplir dos tercios de la condena,  la expulsión del territorio nacional durante un plazo de seis años.

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