El secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso, no tiene prisa por definir quién encabezará la candidatura del partido en las elecciones a la Alcaldía de Ourense, dejando claro ayer en una visita a la ciudad que los estatutos de la formación son claros y que habrá que esperar unos meses para conocer el reglamento. “Será despois do verán, igual que nos procesos anteriores. Os tempos son os que son”, declaró el líder de los socialistas gallegos.
No le preocupa, tampoco, el choque interno que se avecina en la agrupación local del PSOE para dirimir quién encabeza la lista en los comicios, una vez que el actual secretario provincial y portavoz en el Concello, Rafael Rodríguez Villarino, ya ha mostrado su intención de repetir como número uno, mientras que la nueva responsable de la agrupación de la ciudad, Natalia González, también tiene papeletas para postularse.
Con ambos presentes en el acto, Formoso destacó la democracia interna del partido para este tipo de designaciones. “Temos un sistema baseado na democracia, no soberanía da militancia, un sistema enriquecedor e innovador na política española. Cada compañeiro ten a oportunidade se ten ilusión e un equipo de traballo, de estar”, dijo el secretario xeral del PSdeG, que considera que el objetivo debe ser otro: “Eu trasladaría a mensaxe de que hai que devolver á cidade a dignidade e a normalidade que perdeu en 2019”.
Cuestionado sobre si teme un efecto negativo por los resultados en las elecciones andaluzas, Formoso dejó claro que no. “Se hai un proceso no que o factor persoal condiciona, ese é unha elección municipal”, señaló el líder del PSdeG, que niega también la existencia de un “efecto Feijóo” en la política española: “A nivel municipal o que importan son as caras”.
El PSdeG exige a la Xunta “respecto” a la enfermería
El motivo de la visita de Formoso a Ourense era el de mostrar el apoyo del PSdeG al colectivo de la enfermería, asegurando que está siendo “maltratado” por la Xunta, a la que pide “respecto” a estos profesionales al entender que está asumiendo “unha sobrecarga de traballo inasumible”.
Formoso dijo que la enfermería tiene asignada una media de 1.600 tarjetas sanitarias cuando la ratio del Ministerio de Sanidad se sitúa en 1.000. Por tanto, exige al Gobierno gallego que incremente en 140 millones el presupuesto para Atención Primaria en los presupuestos del próximo año.
