La ourensana dijo que está "a la expectativa" de si se producen hechos que puedan derivar en un caso de "acoso laboral"
La diputada del PSOE por la provincia de Ourense en el Congreso, Rocío de Frutos, no oculta su "indignación y tristeza" por la decisión de la gestora del PSOE de apartarla de la portavocía adjunta de la Comisión de Empleo el pasado jueves, una decisión incluida en una reestructuración que afectó a aquellos parlamentarios que rompieron la disciplina de voto del partido en la sesión en la que se invistió presidente a Mariano Rajoy.
"Esto no lo esperaba, no pensaba que iba a haber algo más allá de la sanción económica. No es una cuestión de sillones, sino de dignidad profesional. Lo veo con tristeza porque afecta a la visibilidad de la provincia, estar ahí era trascendental, me veía cómoda. Es, sin duda, un exceso y una purga", destaca De Frutos. La ourensana asegura, además, que se siente respaldada por la militancia y distintos cargos del PSOE en la provincia, un grupo de gente en que el que no está la dirección. "Ellos sabrán porque me tienen inquina, nunca les he hecho nada", indica.
De Frutos cuestiona también la decisión de la gestora del partido a nivel estatal. "Esto coser no es, con la sanción económica creo que habría bastado", indicó. La diputada advirtió incluso de que no descarta denunciar a su partido por "acoso" en caso de que no se le permita "trabajar con fluidez". "Espero que la retirada de la portavocía adjunta no suponga trabas en el registro de iniciativas, porque entonces sí que tomaría otras medidas más drásticas", incidió, porque influir sobre su trabajo sería "cierto acoso".
