Los graniteros ourensanos inauguraron ayer su nueva sede en el Centro Transfronterizo de Barbadás con la clausura de un curso de prevención de riesgos laborales. El sector busca, en plena crisis, ampliar mercados fuera de la provincia.
La asociación provincial de graniteros de Ourense, que integra a 30 empresarios del sector, inauguró ayer oficialmente su nueva sede, ubicada en el Centro Transfronterizo de Barbadás, coincidiendo con la clausura del curso de prevención de riesgos laborales, A seguridade na producción e no producto. El acto contó con la asistencia del conselleiro de Educación, Jesús Vázquez, quien en su etapa de decano de la Facultad de Ciencias había realizado, junto a su equipo, un estudio en torno a este sector minero y sus puntos fuertes y debilidades.
A través de este curso, la asociación continúa apostando por una de sus principales líneas de trabajo, basada en la mejora de las condiciones de seguridad en el sector, así como en la profesionalización del personal. Antes de la clausura, la subdirectora xeral de recursos minerais, María José Mijares, participó en una mesa redonda.
En el acto de clausura, los asistentes al curso recibieron el diploma acreditativo y pudieron seguir un vídeo sobre el granito en Ourense. Un sector que, según explicaba ayer el secretario de la asociación, Alfonso Moral, genera alrededor de 225 empleos directos, con una disminución importante de puestos de trabajo debido a los efectos de la crisis. Así, la crisis se debe, por un lado, a la merma de la demanda y, por el otro, al hecho de que hay empresas portuguesas que, aunque atraviesan una situación difícil como la nuestra, tienen menos costes y cargas sociales por lo que ofrecen productos casi por debajo del coste y están metiendo mucha piedra en la provincia.
A pesar de estas dificultades, el sector es maduro y está tratando de adaptarse para llevar sus productos fuera de Ourense, afirma Moral. En eso trabaja tam bién la asociación, que maneja un plan operativo anual para lograr sus tres objetivos principales: profesionalización del personal, racionalización de la producción y divulgación del producto. Para ello, la asociación organiza talleres y cursos. Para el secretario de los graniteros ourensanos tenemos que estandarizar el producto pero, al mismo tiempo, ofrecer un servicio de asesoramiento y colocación que nos permita diferenciarnos de otros productos estandarizados.
A través de este curso, la asociación continúa apostando por una de sus principales líneas de trabajo, basada en la mejora de las condiciones de seguridad en el sector, así como en la profesionalización del personal. Antes de la clausura, la subdirectora xeral de recursos minerais, María José Mijares, participó en una mesa redonda.
En el acto de clausura, los asistentes al curso recibieron el diploma acreditativo y pudieron seguir un vídeo sobre el granito en Ourense. Un sector que, según explicaba ayer el secretario de la asociación, Alfonso Moral, genera alrededor de 225 empleos directos, con una disminución importante de puestos de trabajo debido a los efectos de la crisis. Así, la crisis se debe, por un lado, a la merma de la demanda y, por el otro, al hecho de que hay empresas portuguesas que, aunque atraviesan una situación difícil como la nuestra, tienen menos costes y cargas sociales por lo que ofrecen productos casi por debajo del coste y están metiendo mucha piedra en la provincia.
A pesar de estas dificultades, el sector es maduro y está tratando de adaptarse para llevar sus productos fuera de Ourense, afirma Moral. En eso trabaja tam bién la asociación, que maneja un plan operativo anual para lograr sus tres objetivos principales: profesionalización del personal, racionalización de la producción y divulgación del producto. Para ello, la asociación organiza talleres y cursos. Para el secretario de los graniteros ourensanos tenemos que estandarizar el producto pero, al mismo tiempo, ofrecer un servicio de asesoramiento y colocación que nos permita diferenciarnos de otros productos estandarizados.
