La saturación del PAC de Concejo, en la ciudad, obligó a reforzar la plantilla de médicos por la tarde
El repunte de la gripe vuelve a poner en jaque a los centros sanitarios la ciudad. Tras una semana convulsa en la que los servicios de Urgencias, Medicina Interna y Neumología del CHUO se vieron saturados ante la constante entrada de pacientes, ayer fue el turno del Punto de Atención Continuada (PAC) situado en la céntrica calle Concejo.
La llegada al centro de numerosas personas desde primera hora de la tarde -aquejadas en su inmensa mayoría por síntomas de la gripe- desbordó a la plantilla del centro, que contaba ayer con tres facultativos, lo que desembocó en largas esperas y aglomeraciones de hasta cerca de 80 personas en las salas de espera y pasillos del PAC.
La falta de atención provocó varias quejas por parte de los usuarios. "Estivemos agardando dende as tres da tarde a que alguén atendera ao meu fillo", relataba uno de los afectados, padre de un niño de tres años al que le habían detectado "febre moi alta" y que no fue atendido hasta pasadas las siete y media de la tarde, a pesar de las reiteradas protestas ante el personal, que se remitió a pedirle paciencia.
Ante este desbordamiento, fue necesario el refuerzo de la plantilla con la incorporación progresiva de dos médicos más pasada la media tarde. Debido a la no existencia de listas, esta adición de personal extra se realizó personalmente, y uno a uno, a todos los médicos que se encontraban activos ayer. No obstante, este refuerzo "se pone a su disposición inmediatamente", según defienden desde la Gerencia de gestión.
Estos profesionales incorporados ante la situación de saturación del PAC permanecieron "el tiempo que desde el centro se consideró necesario", aunque el personal dio por controlada la situación hacia la noche.
Desde la Gerencia de gestión reconocen la existencia de "demoras" debido a la gran cantidad de pacientes que acuden a los centros sanitarios. Nuevamente, achacó a la mayor afluencia de las enfermedades víricas los problemas de estos días. "Al coincidir mucha gente enferma, la gente se ve obligada a esperar más de lo habitual", explican, añadiendo que durante todo el fin de semana "ha habido una gran afluencia de pacientes".
Durante la semana, las organizaciones sindicales habían advertido de que la falta de personal sanitario podría provocar problemas durante el fin de semana que, finalmente, se produjeron.
