Sirvió de preámbulo al reconocimiento que le brindará Cataluña en A Veiga

Un homenaje en la Diputación pone en valor el papel de Foxo en la música gallega

Actuaciones musicales, recordatorios y elogios marcaron la presentación en la Diputación del reconocimiento que los gallegos de Cataluña rendirán a Xosé Lois Foxo los días 11 y 12 en A Veiga. El acto se convirtió ya en un pre-homenaje, donde se puso en valor la labor del director de la Real Banda de Gaitas con la música gallega.
La Federación en Entidades Culturais Galegas de Catalunya, que preside el macedano Luis Lamas, ha decidido rendir un homenaje al músico, compositor, investigador y maestro de gaiteiros, Xosé Lois Foxo, los próximos días 11 y 12 durante la reunión anual que el colectivo hace en Galicia, este año en A Veiga. Este evento fue presentado ayer en la Diputación en un acto que se convirtió ya en un pre-homenaje, que Foxo recibió agradecido y con humildad, recordando una afición por un instrumento que le acompañaba hasta cuando iba ‘coas vacas ó monte’.

Con este homenaje, la federación pretende reconocer la labor que Foxo desarrolló por la música popular de Galicia a raíz, precisamente, en sus primeras experiencias didácticas en Barcelona, pues fue en esta ciudad donde fundó la Escuela de Gaitas ‘Toxos e xestas’ para dotar de rigor académico el aprendizaje de este instrumento y donde creó la banda de gaitas con el mismo nombre, que fue la primera que se constituyó.

Luis Lamas, impulsor de la idea, destacó la ‘labor impresionante’ de Foxo con la música gallega, secundada por el presidente de la Diputación, José Luis Baltar, que lo definió como un ‘embaixador da nosa terra’.

La Real Banda, de gira por China

Caixanova y la Real Banda de Gaitas suscribieron ayer un convenio de colaboración que permitirá a la organización ourensana ‘difundir el conocimiento de la gaita’ como instrumento más representativo del folclore gallego, en una serie de conciertos que tiene previsto realizar por diversas ciudades de China. La gira de diez días se llevará a cabo a principios de 2010 por Pekín y otras ciudades chinas como Shangai y Xiang.

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