El área sanitaria ourensana dijo adiós ayer a uno de sus referentes. El ginecólogo José Luis Doval colgó la bata para disfrutar de una merecida jubilación tras años de lucha por una sanidad pública de calidad y situar a la provincia como pionera en la atención de la salud de las mujeres. Impulsar el Centro de Orientación Familiar (COF) o coordinar la atención ginecológica en los centros de salud y extender el Programa de la Mujer, fueron algunos de sus logros.
“Doval é un referente en todos os sentidos. Unha persoa cuxa influencia trascende fóra do seu servizo, pero tamén do hospital”, reconoce Félix Rubial, gerente del área sanitaria. Los compañeros del ginecólogo se despidieron formalmente ayer y le dieron una sorpresa, porque hoy comienzan sus vacaciones como preludio de su jubilación el mes que viene. “Ver a emoción de todos os compañeiros amosa todo o que significa a súa figura. O seu liderazgo empático e carismático deixa moitos discípulos”, asegura Rubial.
Carlos Menéndez, médico del centro de salud de A Cuña, es uno de los muchos profesionales que se califica como “discípulo” de Doval. “Formounos para que o noso Programa da Muller sexa distinto ao doutras áreas, que permite acercarlles un dereito a todas elas na provincia”, afirma. Seguimientos de embarazos de bajo riesgo, orientación sobre métodos anticonceptivos, la práctica de citologías o la atención en la menopausia se llevan a cabo en los centros de salud gracias a Doval: “O que temos hoxe, en parte, débese á súa loita na implicación da Primaria coa saúde das mulleres”.
Disponer de un sistema sanitario de calidad y universal para todas las personas es una de las premisas que siguió durante tantos años de carrera. Adelantándose en ocasiones a los tiempos. “Non se falaba de sexualidade ata que Doval chegou aquí. Agora, décadas despois, deixa moito traballo feito para as futuras xeracións”, destaca Celia Perdiz, trabajadora social en el COF. La atención integral de las mujeres en el sistema público es la gran huella en la que se instruyeron aquellos que llegaron tras él y los que quedan: “Foi un formador de formadores”, apunta Perdiz.
Por y para la mujer
En los años 80 impulsó el COF para dotar a las mujeres de las herramientas para decidir sobre su salud reproductiva. Pionero a nivel nacional, con su creación les dotó de la capacidad de decisión en todas las facetas de la sexualidad. “Ourense non é a mesma desde que comezou o COF”, expresa Perdiz. La interrupción del embarazo o la reproducción asistida forman parte de su compromiso con la sanidad pública, dos servicios por los que luchó para la población femenina con carácter universal. “Foi pioneiro no país coa implantación da interrupción voluntaria do embarazo. Perseguiu o cumplimento dese dereito con todas as consecuencias”, recalca la trabajadora social.
La Unidad de Reproducción Asistida es otro de los legados que deja el ginecólogo en el área sanitaria, siendo la provincia pionera en ofrecer el servicio a su ciudadanía. “Una de las frases que siempre nos dice es que hay que hacer lo que es necesario, bien y rápido. Esta prestación es un valor añadido para el sistema público de salud”, cuenta Carmen Varillas, responsable de esta unidad. Junto a Doval trabajó muchos años en Ginecología y asegura que todo el desarrollo actual en materia de sexualidad y de la salud de la mujer “viene de su mano”.
La doctora destaca su compromiso con el “empoderamiento” femenino a través de las prestaciones que consiguió. “Ahora es muy fácil hablar de la salud de mujer, pero hace décadas no era así. Fue un visionario en muchos ámbitos”, apunta Varillas, quien reconoce que es “muy buen compañero”.
Su capacidad de liderazgo y de conseguir avances para la sanidad pública continúan a día de hoy, dejando el camino a seguir para las próximas generaciones. “É destes profesionais que forma parte dunha xeración que construiu o sistema sanitario actual”, reafirma Menéndez.
