Los bancos y columpios no son suficientes para algunos parques. El concepto tradicional de zona verde se ve en ocasiones alterado por la innovación de espacios que se salen de lo habitual. Ourense cuenta con varios rincones de este tipo que, sin embargo, tienen una suerte desigual en su grado de aceptación ciudadana.
Residuos, plantas aromáticas y pies descalzos integran los espacios más pecualiares de la ciudad CARMEN CRESPO Hay jardines que sirven para sentarse a la sombra y que los niños jueguen. Hay jardines que valen para pasear. Hay jardines que nacen con una vocación distinta a la de los demás. Quieren ser un lugar de reflexión. Un espacio para avivar los sentidos. Un sitio distinto. La ciudad tiene rincones peculiares. Unos son presente, otros son futuro y alguno ya casi es pasado.
Jardín de las esencias. Plantas de lavanda, romero, tomillo y otras especies arómaticas componen este espacio, situado en la zona termal de Outariz. Nació con el propósito de agudizar los sentidos -sobre todo el olfato- a los viandantes y también su conocimiento sobre las plantas aromáticas. La original idea presenta como principal inconveniente el mantenimiento, al combinar especies que necesitan mucha agua con otras de secano. A ello se suman los que se llevan las esencias a su casa.
Pies descalzos. Otro deleite para los sentidos en la zona termal (cerca de A Chavasqueira), en este caso, a través de la sensación de pisar con los pies descalzos por un recorrido compuesto por cantos rodados, áridos más pequeños, corteza, hierba y vegetales más duros. No cuajó y actualmente está en desuso debido al riesgo de que se arrojaran cristales u otros objetos que pueden causar lesiones.
Xardín da Metamorfose. Recién inaugurado en la parte posterior de Rodríguez de la Pasera, su innovador diseño -cuatro montículos llenos de desperdicios- causó un revuelo inicial en el barrio. Compuesto por materiales reciclados, pretende que los paseantes de las riberas del Barbaña reflexionen sobre el reciclaje y el futuro de los residuos.
Parque da Canle. Tiene la peculiaridad de que está ubicado sobre las placas de hormigón de unos depósitos. Aún sin inaugurar, diferencia tres espacios en distintas alturas: la más alta servirá de entrada y mirador, la intermerdia será la de estancia y la inferior, la zona de juegos. Es un parque eminentemente paisajístico.
Parque del agua. Es, en realidad, una pequeña zona de juegos infantiles, tras la iglesia de Fátima, en O Couto. La idea original era que al mover los niños el columpio éste arrojase agua. El concepto no gustó mucho a los padres.
Un árbol para cada día del año
La Concejalía de Medio Ambiente trabaja ya en un nuevo proyecto de parque con mensaje. Será en las inmediaciones del Xardín da Metamorfose y será el jardín de la vida. La idea es que en una superficie que rondará los 12.000 metros cuadrados se plantarán 366 árboles (uno por cada día del año, incluyendo el 29 de febrero de los bisiestos), de forma que cada ourensano tendrá un árbol con el día de su cumpleaños. Según explica el concejal del área, Demetrio Espinosa, el jardín estará organizado por estaciones, tratando de que se combinen los colores. Por ejemplo, el rojizo y el ocre del otoño y las flores de la primavera. El Concello cuenta ya con el terreno necesario y el proyecto está en fase de ejecución. Las previsiones del área municipal es que la partida necesaria para su materialización sea incluida en los presupuestos municipales del próximo año.
Con jardines de estas características, se busca ofrecer alternativas a los parques tradicionales. Un parque no tiene que ser una zona exclusivamente para jugar. Tiene que haber espacios para todos y que las personas que quieran ir a un parque a leer encuentren la tranquilidad necesaria, asegura Espinosa. Por ello, añade, en el parque da Canle se diferencian claramente tres zonas y también el de Avilés de Taramancos será otro con cepto de jardín. A su juicio, desgraciadamente, en Ourense no ha habido preocupación por comunicar otro concepto de jardín. El edil considera que hubo políticas muy anárquicas y populistas de establecer áreas de juegos en cualquier sitio y creo que es bueno que estas áreas se concentren en espacios más grandes porque los niños también disfrutan jugando con otros niños y permite mejorar el mantenimiento.
Jardín de las esencias. Plantas de lavanda, romero, tomillo y otras especies arómaticas componen este espacio, situado en la zona termal de Outariz. Nació con el propósito de agudizar los sentidos -sobre todo el olfato- a los viandantes y también su conocimiento sobre las plantas aromáticas. La original idea presenta como principal inconveniente el mantenimiento, al combinar especies que necesitan mucha agua con otras de secano. A ello se suman los que se llevan las esencias a su casa.
Pies descalzos. Otro deleite para los sentidos en la zona termal (cerca de A Chavasqueira), en este caso, a través de la sensación de pisar con los pies descalzos por un recorrido compuesto por cantos rodados, áridos más pequeños, corteza, hierba y vegetales más duros. No cuajó y actualmente está en desuso debido al riesgo de que se arrojaran cristales u otros objetos que pueden causar lesiones.
Xardín da Metamorfose. Recién inaugurado en la parte posterior de Rodríguez de la Pasera, su innovador diseño -cuatro montículos llenos de desperdicios- causó un revuelo inicial en el barrio. Compuesto por materiales reciclados, pretende que los paseantes de las riberas del Barbaña reflexionen sobre el reciclaje y el futuro de los residuos.
Parque da Canle. Tiene la peculiaridad de que está ubicado sobre las placas de hormigón de unos depósitos. Aún sin inaugurar, diferencia tres espacios en distintas alturas: la más alta servirá de entrada y mirador, la intermerdia será la de estancia y la inferior, la zona de juegos. Es un parque eminentemente paisajístico.
Parque del agua. Es, en realidad, una pequeña zona de juegos infantiles, tras la iglesia de Fátima, en O Couto. La idea original era que al mover los niños el columpio éste arrojase agua. El concepto no gustó mucho a los padres.
Un árbol para cada día del año
La Concejalía de Medio Ambiente trabaja ya en un nuevo proyecto de parque con mensaje. Será en las inmediaciones del Xardín da Metamorfose y será el jardín de la vida. La idea es que en una superficie que rondará los 12.000 metros cuadrados se plantarán 366 árboles (uno por cada día del año, incluyendo el 29 de febrero de los bisiestos), de forma que cada ourensano tendrá un árbol con el día de su cumpleaños. Según explica el concejal del área, Demetrio Espinosa, el jardín estará organizado por estaciones, tratando de que se combinen los colores. Por ejemplo, el rojizo y el ocre del otoño y las flores de la primavera. El Concello cuenta ya con el terreno necesario y el proyecto está en fase de ejecución. Las previsiones del área municipal es que la partida necesaria para su materialización sea incluida en los presupuestos municipales del próximo año.
Con jardines de estas características, se busca ofrecer alternativas a los parques tradicionales. Un parque no tiene que ser una zona exclusivamente para jugar. Tiene que haber espacios para todos y que las personas que quieran ir a un parque a leer encuentren la tranquilidad necesaria, asegura Espinosa. Por ello, añade, en el parque da Canle se diferencian claramente tres zonas y también el de Avilés de Taramancos será otro con cepto de jardín. A su juicio, desgraciadamente, en Ourense no ha habido preocupación por comunicar otro concepto de jardín. El edil considera que hubo políticas muy anárquicas y populistas de establecer áreas de juegos en cualquier sitio y creo que es bueno que estas áreas se concentren en espacios más grandes porque los niños también disfrutan jugando con otros niños y permite mejorar el mantenimiento.
