Javier Gutiérrez y Enrique Otero: "En Galicia cada curva es un mundo, siempre que pueda rodaré aquí"

Algo más de 200 presos de la cárcel de Pereiro fueron los primeros espectadores ourensanos de “Honeymoon”, la única película grabada en la provincia -con el patrocinio de la Diputación- que compite en la sección oficial del OUFF y una de las dos españolas (junto a “Un amor”, de Isabel Coixet). Precisamente el director coruñés, Enrique Otero, y el actor protagonista, el ferrolano Javier Gutiérrez (ganador dos veces del Goya a mejor interpretación por “La isla mínima” y “El auto”), visitaron la prisión para proyectar esta “road movie” dramática que parte de un matrimonio en crisis que trata de conseguir, a toda costa, el dinero que necesitan para recuperar el cuerpo de su hijo fallecido en un accidente. La reconocida y premiada Nathalie Poza comparte escena con Gutiérrez en una proyección que ayer en el centro comercial Ponte Vella agotó entradas. ¿Cómo ha sido la experiencia en la cárcel? Enrique Otero: Increíble. Nos juntamos con 14 o 15 reclusos contándonos su experiencia. Javier Gutiérrez: Es una lección de vida, un ejemplo de lo que debería ser un centro penitenciario, donde intentan realmente que haya una reinserción. Los testimonios son espeluznantes y acercar el cine desde el OUFF y que puedan abstraerse lo agradecen. Y nosotros como artistas y ciudadanos también lo agradecemos mucho. EO: Había alguna historia que parece de guion de cine. ¿Les da para otra película la cárcel? JG: Es que es gente muy joven que parece que haya vivido siete vidas. Curiosamente, muchos internos que tienen que ver con la ludopatía y las nuevas adicciones. Y la película, ¿cómo conectan? EO: El tema es que conectamos, somos de la misma quinta y un día le hice la propuesta porque como es gallego viene a menudo. Le presenté el guion, a mí ya me cayó bien ahí. Y parece que el guion le convenció. JG: Estabas armando el casting, buscando financiación… EO: De hecho Javier me ayudó a buscar otros actores. ¿Cómo es su personaje? JG: Creo que pocas veces un guion me ha atrapado tanto como el de “Honeymoon”, es una historia que aúna diferentes géneros, diferentes estilos, con personajes muy poderosos y una historia que nos atañe a todos. Va de segundas oportunidades, de pérdidas... Me pareció un guion que había que contar. Y hay algo que yo nunca he vivido en mis años como profesional, y es que íbamos a toma casi única en toda la película, que se grabó en cinco semanas y con muchas localizaciones. EO: Cuando el trabajo está, está. Los diálogos eran finos, estaba muy interiorizada la película. Lo único que hubo que matizar es el tono de la película, porque mezcla estilos. Hay de todos los géneros. EO: Te podrías ir al dramón del siglo, pero te puedes ir al humor también. La película es un drama con tintes de humor negro. JG: Desde la interpretación, el objetivo era hilar muy fino para no caer en el melodrama ni en una cosa demasiado grotesca. Es una cosa que pasas a un humor muy negro, muy que tiene que ver con Galicia. ¿Qué significa como profesionales poder rodar en Galicia? EO: Yo siempre que pueda lo voy a hacer, aunque hay un trozo rodado en Zamora y Valladolid. Pero es que aquí en Galicia cada curva es un mundo diferente. Puedes pasar del Vigo portuario a la Coruña, a la Terra Chá que parece un desierto o al bosque medieval del Caurel. Aquí puedes rodar desde “El señor de los anillos” hasta yo que sé. JG: Quique, te van a hacer a ti de la Film Comission de Ourense (ríe). ¿Le gusta rodar personajes aquí? JG: Yo estoy encantado de rodar en Galicia, estoy rodando una serie para la productora Bambú y después de cuatro meses aquí me da pena irme. Cada vez se está rodando más en Galicia, no solo por las localizaciones, sino por los profesionales como la copa de un pino que hay. Dicen que “Honeymoon” es impredecible… EO: Creo que es uno de los dones de la película. Para mí es un don que te tengas que estar concentrando, el cine es la comunión de ir y estar concentrado. ¿Qué encontrará el espectador? EO: Sorpresa desde luego. Es un poco road movie, pero también es un viaje muy potente. Es una película que atrapa. JG: Es una película muy recomendada, como espectador es el cine que me gusta ver y que disfruto. Está emparentado con los hermanos Coen, salvando las distancias. Podríamos ser cualquiera de nosotros los protagonistas, que les pasan mil y una peripecias y disfrutan de esta pareja de enamorados.