Un joven de Rebacido (A Peroxa), Marcos Iglesias Pérez, de 25 años, fue hallado muerto ayer en la cocina de la casa de un vecino de Outeiriño, en el mismo municipio, con el que tenía amistad. El cadáver no presentaba señales de violencia.
La Guardia Civil abrió una investigación para esclarecer el fallecimiento de un joven de A Peroxa, Marcos Iglesias Pérez, de 25 años, con domicilio en la localidad de Rebacio.
El cadáver del joven fue encontrado a las 08.15 horas de ayer tumbado en la cocina de la casa de un vecino de Outeiriño, localidad situada a escasa distancia de Rebacido.
El dueño de la vivienda, Jesús Pereira, al levantarse y cuando iba a preparar el desayuno, se encontró con el joven muerto y alertó a las fuerzas de seguridad, que precintaron el inmueble al tiempo que avisaban a las autoridades judiciales.
Buena amistad
Jesús Pereira tiene un hijo de la edad del fallecido. Ambos tenían amistad con Marcos Iglesias, que solía visitar con frecuencia su domicilio. En la noche del sábado estuvo con ellos y no sabemos qué fue lo que pasó. Espero que la Guardia Civil investigue hasta el fondo y se pueda saber de qué murió, explicó una hermana del fallecido.
El cadáver no presentaba señales de violencia, según la Guardia Civil, y fue trasladado al Complexo Hospitalario para realizarle la autopsia y, así, determinar las causas del fallecimiento, que conmocionó a los vecinos de ambos pueblos.
Jesús Pereira, al que ayer no pudo localizar este periódico, llegó al pueblo hace unos cuatro años, cuando compró una casa, en la que reside con su único hijo.
El fallecido estaba soltero y trabajaba como carpintero en una empresa del municipio. Era un pedazo de pan, que nunca tuvo problemas con ningún vecino, todo el mundo lo quería, afirmaba ayer su hermana entre sollozos, recalcando que los dueños de la vivienda en que fue hallado muerto tampoco aparentan ser malas personas, explicó. La Guardia Civil realizó una inspección ocular en la vivienda y ayer mantenía un mutismo total sobre las circunstancias del fallecimiento del joven.
Sobre las diez de la mañana de ayer, el juez de guardia se personaba en el lugar para ordenar el levantamiento del cadáver. Los resultados de la autopsia serán dados a conocer hoy.
El cadáver del joven fue encontrado a las 08.15 horas de ayer tumbado en la cocina de la casa de un vecino de Outeiriño, localidad situada a escasa distancia de Rebacido.
El dueño de la vivienda, Jesús Pereira, al levantarse y cuando iba a preparar el desayuno, se encontró con el joven muerto y alertó a las fuerzas de seguridad, que precintaron el inmueble al tiempo que avisaban a las autoridades judiciales.
Buena amistad
Jesús Pereira tiene un hijo de la edad del fallecido. Ambos tenían amistad con Marcos Iglesias, que solía visitar con frecuencia su domicilio. En la noche del sábado estuvo con ellos y no sabemos qué fue lo que pasó. Espero que la Guardia Civil investigue hasta el fondo y se pueda saber de qué murió, explicó una hermana del fallecido.
El cadáver no presentaba señales de violencia, según la Guardia Civil, y fue trasladado al Complexo Hospitalario para realizarle la autopsia y, así, determinar las causas del fallecimiento, que conmocionó a los vecinos de ambos pueblos.
Jesús Pereira, al que ayer no pudo localizar este periódico, llegó al pueblo hace unos cuatro años, cuando compró una casa, en la que reside con su único hijo.
El fallecido estaba soltero y trabajaba como carpintero en una empresa del municipio. Era un pedazo de pan, que nunca tuvo problemas con ningún vecino, todo el mundo lo quería, afirmaba ayer su hermana entre sollozos, recalcando que los dueños de la vivienda en que fue hallado muerto tampoco aparentan ser malas personas, explicó. La Guardia Civil realizó una inspección ocular en la vivienda y ayer mantenía un mutismo total sobre las circunstancias del fallecimiento del joven.
Sobre las diez de la mañana de ayer, el juez de guardia se personaba en el lugar para ordenar el levantamiento del cadáver. Los resultados de la autopsia serán dados a conocer hoy.
