Los investigados son de varias demarcaciones, cinco vecinos de Ourense
El fiscal antidroga de Ourense, Miguel Ruiz, ha solicitado al titular del Juzgado Instrucción 1, Leonardo Álvarez, su inhibición en la operación contra el narcotráfico que hace unos días se saldaba con 17 detenidos aunque también hay personas investigadas pendientes de prestar declaración judicial. Una operación en la que se incautaron siete kilos de heroína, cuyo destino era Ourense, según los investigadores, y 66 kilos de speed en el País Vasco.
La fiscalía cree que debe ser alguno de los juzgados centrales de la Audiencia Nacional el que lleve el asunto al tratarse de un caso de narcotráfico con implicados de varias provincias. El magistrado, tras dar traslado a los letrados de los imputados para que informen, decidirá, una decisón que aun admite recurso.
En este asunto hay cinco ourensanos supuestamente implicados en uno de los clanes dedicados a la heroína, dos de ellos en prisión provisional: Francisco Javier Janeiro Rodríguez "Javillo", recientemente condenado a ocho años de cárcel por otro asunto de narcotráfico, y su hijo Miguel. También fueron detenidos, pero quedaron en libertad, la mujer del primero, Rosa María Rodríguez (condenada a tres años y medio en el asunto de su marido en calidad de cómplice), y un supuesto colaborador, Diego Rodríguez. La hija del matrimonio, Rebeca, figura como investigada aunque no llegó a ser arrestada.
La investigación policial considera que los siete kilos de heroína que le fueron incautados a Sadullah Unnu, alias Nicol, presuntamente iban destinado a Javillo, quien también tiene casa en Portonovo. Está considerado por las fuerzas de seguridasd como uno de los hombres "fuertes" dentro de los clanes que mueven heroína a gran escala en Galicia e incluso norte de Portugal.
El juez de Instrucción 1 decretó el ingreso en prisión de ocho de los 15 detenidos que pasaron a disposición judicial (fueron 17 los arrestados pero a otros dos la Policía Nacional los dejó en libertad).
