Raúl Alberto M.P. negó ayer en el Penal 2 que fuese el hombre que entró a robar en una casa unifamiliar de Seixalbo el 2 de mayo de 2021 y, al ser descubierto, se encerró en la vivienda, por lo que la Policía Local tuvo que llamar a los bomberos para abrir la puerta. Él, quien dejó claro al inicio de la vista que no confiaba en la justicia española, asegura que pasaba por allí porque venía de casa de un amigo, y no solo lo detuvieron, sino que los agentes le pegaron.
Pero la fiscal asegura que fue visto por los policías cuando saltó por el balcón, y reclama una pena de un año, 11 meses y 29 días por una tentativa de robo con fuerza en casa habitada, aunque las propietarias la ocupan ocasionalmente. Asegura la representante del Ministerio Público que forzó las ventanas y persianas para entrar.
En su petición de condena, interesó la expulsión de Raúl -es venezolano- porque, según alegó, era reincidente y no tenía arraigo en el país. Esta afirmación fue contestada por el acusado, quien declaró desde la cárcel de Monterroso (Lugo), al finalizar el juicio en el turno a la última palabra. “Estuve en el Ejército, trabajé en operaciones especiales” y, según especificó, hasta tenía planos de la Moncloa.
El letrado de la defensa interesó la absolución, alegando que “no hay prueba de cargo contundente”, con contradicciones en las manifestaciones de los agentes.
