El último de los diez robos en un mes ha sido en un bar, objetivo en dos ocasiones en 20 días

Los ladrones se ceban con el pequeño comercio carballiñés

La Guardia Civil, ayer a la entrada del establecimiento.
La oleada de pequeños robos en establecimientos comerciales y de hostelería no se detiene en Carballiño, y ya se contabilizan 10 en el último mes y en pleno centro urbano. Por segunda vez en 20 días, la pulpería Novo Flamingo era de nuevo objetivo de los ladrones durante la madrugada del pasado martes, siguiendo idéntico modus operandi del pasado 10 de abril, aunque causando muchos más destrozos en el local.
Fuentes próximas a la investigación no descartan que sean los mismos autores de la mayoría de estos robos que, según la Policía Local, tienen el objetivo de conseguir dinero rápido para comprar estupefacientes. El jefe de la Policía Local, Francisco Valeiras, ponía en conocimiento del alcalde, Argimiro Marnotes, el repunte de personas enganchadas a la heroína. 'É algo que se constata nas últimas semanas. Están entrando en locales para conseguir cartos para comprar droga', declaraba el regidor, manifestando su preocupación ante esta oleada de robos, reconociendo que 'unha patrulla non é suficiente, pero de momento son os medios que temos'.

El propietario de Novo Flamingo, Yago Rodríguez, visiblemente nervioso tras este segundo atraco, declaraba que 'esto non é normal, porque xa van máis de nove roubos aquí no centro e nun mes, o Concello ten que tomar medidas, si dispón de medios de seguridade para controlar por exemplo a Festa do Pulpo, debería organizarse para prestar ese mesmo servicio cada día'. Marnotes manifestaba que está prevista la contratación de cuatro auxiliares durante cuatro meses y la inclusión en la Relación de puestos de trabajo (RPT) de dos plazas de Policía Local, que se pretenden cubrir por comisión de servicio durante dos años, dado que el Gobierno no permite incorporar nuevos funcionarios.

Yago Rodríguez se mostraba indignado en la mañana de ayer, a la entrada de su negocio, en cuyo interior varios efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Judicial recogían huellas y demás pruebas que puedan servir para descubrir la identidad de los autores. El propietario sospecha que al menos han sido dos intrusos porque 'romperon o teito para sacar o televisor'.

Los ladrones levantaron unos centímetros la persiana de una de las ventanas y abrieron un pequeño boquete en el cristal por el que accedieron al interior. El espacio era tan reducido que incluso se cortaron, quedando restos de sangre a la vista. Entre otros destrozos, reventaron las máquinas tragaperras (entre 600 y 1.000 euros) y de tabaco (entre 200 y 400 euros) y se llevaron el cambio.

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