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Ocho lugares que uno debe visitar en Ourense

El Pórtico do Paraíso de la Catedral de Ourense (JOSÉ PAZ).
photo_camera El Pórtico do Paraíso de la Catedral de Ourense (JOSÉ PAZ).
La monumentalidad de la capital es una invitación a viajar por el tiempo, desde la etapa medieval a la modernista

Además de su riqueza termal, una de los atractivos turísticos más potentes de la ciudad es su monumentalidad. Dos mil años de historia se dejan sentir en la arquitectura monumental de Ourense, un abanico de construcciones que invitan a viajar en el tiempo: al Ourense medieval, renacentista, barroco, modernista… e incluso mucho antes, la ciudad romana y prerromana, famosa por el oro del Miño y las aguas calientes de As Burgas.

Un recorrido básico por el centro histórico  ha de comenzar en las fuentes de As Burgas: la zona se divide tradicionalmente en tres tramos: la fuente monumental o “Burga de Abaixo” (siglo XIX), la explanada central, donde se encuentra la piscina termal, y la “Burga de Arriba” (siglo XVII). Un paseo en la zona superior permite disfrutar de los restos arqueológicos aquí encontrados, donde destaca una piscina-santuario del siglo I d.C.

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La Plaza Mayor: centro y corazón del Ourense monumental, llama la atención su suelo inclinado, una auténtica rareza entre las plazas mayores de España. La Plaza Mayor (antaño Plaza del Campo) acoge alguno de los principales monumentos de la ciudad. Centra el espacio la fachada de la Casa Consistorial, obra de Queralt que ocupa el único lateral sin soportales. A su lado el Antiguo Palacio Episcopal (el ejemplo más completo de arquitectura civil románica de la ciudad), con el que parece competir en majestuosidad.

Iglesia de Santa María Madre: lugar de la primitiva catedral de Ourense, de la que se conservan las columnas de su fachada. La iglesia no se entiende sin la monumental escalinata por la que se accede, y que conecta la recoleta Plaza de la Magdalena con la Plaza Mayor.

Plaza de la Magdalena: plaza que fue antiguo cementerio y aún hoy conserva ese ambiente sereno y tranquilo. Es una de las más hermosas de la ciudad.

Plaza del Trigo: su irregular forma obedece a ser más un cruce de caminos que una plaza, y sus soportales nos recuerdan la que fue su función durante décadas: antiguo mercado de cerámica, plateros y también cereales, de donde le viene el nombre. 

Iglesia de Santa Eufemia: antiguo colegio jesuita en el que sobresale su fachada, obra de Fray Plácido Iglesias, es un arquetipo del barroco gallego. Llama la atención su forma cóncava, usada para otorgarle una mayor monumentalidad. 

Museo Municipal: el Museo Municipal de Ourense ocupa una hermosa construcción renacentista del siglo XVI, la que fue la casa solariega de los Méndez Montouto. Además de exposiciones temporales, el centro exhibe parte de los fondos del propio museo, una colección más de 1.300 piezas de arte donde figuran importantes nombres de la pintura y escultura en Ourense.

Pazo de Oca-Valladares: es uno de los pazos (palacios) gótico-renacentistas más importantes de Galicia. Es habitual que el Liceo programe conciertos, exposiciones y demás actividades culturales. Su cafetería, en el patio central de columnas, es un lugar tradicional de tertulias en la ciudad. 

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