En los últimos cinco años, los responsables de la Comandancia de Ourense solicitaron sin éxito en varias ocasiones a la Dirección General de la Guardia Civil la posibilidad de abordar una reestructuración del instituto armado en la provincia para evitar que los agentes prestaran servicio en instalaciones municipales. Lo único que consiguieron fue cerrar a mediados del 2009 el puesto de A Mezquita, una pequeña oficina municipal en la que cuatro agentes custodiaban el municipio, además de realizar tareas administrativas.
La Comandancia, según fuentes del instituto armado, pretende concentrar a los agentes en los cuarteles de las villas, sobre todo aquellos que están en buen estado de conservación, desde los que se garantizaría la seguridad de toda la población. Pero esta idea no es compartida por los alcaldes afectados, que en su mayoría se oponen tajantemente a que la Guardia Civil abandone su municipio al considerar que da seguridad y disuade de cometer actos delictivos. 'Loitaríamos por manteñelos aquí. A Garda Civil nun concello sempre impón un pouco de respeto. Se non están, os ladróns teñen menos medo', explicó el alcalde de Trasmiras, Emilio José Pazos.
CÁMARA AGRARIA EN TRASMIRAS
En este municipio, los agentes prestan servicio en el edificio que acogió la antigua cámara agraria y Emilio José Pazos aseguraba ayer que su grupo de gobierno colabora en todo lo que puede con los agentes, tanto a la hora de hacer reformas como en la prestación de servicios.
El puesto de Cualedro comparte espacio con la Casa de Cultura. Ocupa una parte de la planta baja del edificio y el alcalde, Luciano Rivera, también se opone a su desaparición. 'Non ó permitiríamos. O servizo que realiza é fundamental, porque os veciños terían que desplazarse a Verín para presentar unha simple denuncia ou renovar calquera permiso. A Garda Civil presta un servizo fundamental no Concello', afirmó.
El regidor de Entrimo, Ramón Alonso, esgrime el mismo argumento. En este municipio, los agentes disponen de un local municipal para prestar el servicio, instalaciones que fueron preparadas con dinero de las arcas municipales ante el temor de que se llevara el puesto para Bande.
En Maceda, los agentes están en un inmueble de tres pisos, que aparentemente parece un cuartel construido por el Ministerio del Interior. Sin embargo, el edificio es municipal, aunque siempre estuvo destinado a la Guardia Civil. 'Le fue cedido hace muchos años en régimen de alquiler por un simbólico precio', aseguró el alcalde, Xabier Oviedo, recalcando que el edificio ya se conoce en la villa como el cuartel. 'Os axentes saben que teñen toda a colaboración do Concello, aínda fai un ano que construimos unha nova planta no edificio para que dispuxeran de máis espazo', añadió el regidor.
Los concellos, además de ceder las instalaciones que ocupan el puesto, pusieron a disposición de los agentes locales para que guarden los coches. En algunos casos hasta corren con los gastos de agua y luz.
VIVIENDAS
Los puestos que están en dependencias municipales suelen estar abiertos de mañana para atender a la población y cierran por la tarde, dado que los servicios de vigilancia nocturnos se centran y perfilan desde la Comandancia. Los agentes no disponen de viviendas, como los que están destinados en los cuarteles de Verín, Celanova, O Barco o A Rúa, lo que les obliga a alquilar pisos, que en la mayoría de los casos no están en el propio municipio.
Pero el alquiler de casas no parece ser un problema, dado que en todos los los cuarteles de la provincia que son propiedad del Ministerio del Interior hay pabellones de viviendas libres, sin ocupar por los agentes. Esta situación, según el teniente coronel, Miguel Estévez, que la pasada semana estaba al cargo de la Comandancia de Ourense al estar de vacaciones su titular, José Francisco Martínez, se explica por el hecho de que la mayoría de los agentes que están destinados en la provincia son ourensanos y tienen casa propia o la de sus padres cerca del cuartel. 'Al tener una vivienda propia o de algún familiar es justo que vivan con ellos y no en el cuartel', explicó.
Las viviendas de los cuarteles suelen ser ocupadas por agentes de fuera de Galicia.
CÁMARA AGRARIA EN TRASMIRAS
En este municipio, los agentes prestan servicio en el edificio que acogió la antigua cámara agraria y Emilio José Pazos aseguraba ayer que su grupo de gobierno colabora en todo lo que puede con los agentes, tanto a la hora de hacer reformas como en la prestación de servicios.
El puesto de Cualedro comparte espacio con la Casa de Cultura. Ocupa una parte de la planta baja del edificio y el alcalde, Luciano Rivera, también se opone a su desaparición. 'Non ó permitiríamos. O servizo que realiza é fundamental, porque os veciños terían que desplazarse a Verín para presentar unha simple denuncia ou renovar calquera permiso. A Garda Civil presta un servizo fundamental no Concello', afirmó.
El regidor de Entrimo, Ramón Alonso, esgrime el mismo argumento. En este municipio, los agentes disponen de un local municipal para prestar el servicio, instalaciones que fueron preparadas con dinero de las arcas municipales ante el temor de que se llevara el puesto para Bande.
En Maceda, los agentes están en un inmueble de tres pisos, que aparentemente parece un cuartel construido por el Ministerio del Interior. Sin embargo, el edificio es municipal, aunque siempre estuvo destinado a la Guardia Civil. 'Le fue cedido hace muchos años en régimen de alquiler por un simbólico precio', aseguró el alcalde, Xabier Oviedo, recalcando que el edificio ya se conoce en la villa como el cuartel. 'Os axentes saben que teñen toda a colaboración do Concello, aínda fai un ano que construimos unha nova planta no edificio para que dispuxeran de máis espazo', añadió el regidor.
Los concellos, además de ceder las instalaciones que ocupan el puesto, pusieron a disposición de los agentes locales para que guarden los coches. En algunos casos hasta corren con los gastos de agua y luz.
VIVIENDAS
Los puestos que están en dependencias municipales suelen estar abiertos de mañana para atender a la población y cierran por la tarde, dado que los servicios de vigilancia nocturnos se centran y perfilan desde la Comandancia. Los agentes no disponen de viviendas, como los que están destinados en los cuarteles de Verín, Celanova, O Barco o A Rúa, lo que les obliga a alquilar pisos, que en la mayoría de los casos no están en el propio municipio.
Pero el alquiler de casas no parece ser un problema, dado que en todos los los cuarteles de la provincia que son propiedad del Ministerio del Interior hay pabellones de viviendas libres, sin ocupar por los agentes. Esta situación, según el teniente coronel, Miguel Estévez, que la pasada semana estaba al cargo de la Comandancia de Ourense al estar de vacaciones su titular, José Francisco Martínez, se explica por el hecho de que la mayoría de los agentes que están destinados en la provincia son ourensanos y tienen casa propia o la de sus padres cerca del cuartel. 'Al tener una vivienda propia o de algún familiar es justo que vivan con ellos y no en el cuartel', explicó.
Las viviendas de los cuarteles suelen ser ocupadas por agentes de fuera de Galicia.
