El ministerio público solicitaba cuatro años de cárcel para la primera y tres para la segunda, pero rebajó la petición de condena al reconocer las acusadas los hechos
La matriarca del clan de los Madriles, Ana J.G. de 63 años, aceptó ayer dos años de prisión por tres delitos de robo con fuerza en dos naves y una vivienda de San Cibrao. La mujer se sentó en el banquillo del Juzgado de lo Penal 1 de Ourense, junto con un familiar, Lidia P.A., de 35 años, que se conformó con un año de cárcel por los mismos delitos, dado que fueron las dos las que, según reconocieron, perpetraron los robos.
El ministerio público solicitaba cuatro años de cárcel para la primera y tres para la segunda, pero rebajó la petición de condena al reconocer las acusadas los hechos, que se remontan a diciembre del 2016. Entonces, según reconocieron ambas durante la vista, entraron en un inmueble, situado en la carretera de Salgueiros (San Cibrao) y se adueñaron de varios fregaderos de cocina. Días más tarde, según la acusación, fracturaron la puerta de una vivienda de Calvos y, una vez en el interior, sustrajeron cuatro ventanas de aluminio, valoradas en 400 euros.
En el mismo mes de diciembre, las dos acusadas aprovecharon que había una puerta abierta en una nave industrial del polígono de San Cibrao para sustraer una caja de recortes de perfiles de aluminio.
Los afectados renunciaron a cualquier tipo de indemnización. La matriarca tienen antecedentes por robo.
