Los operarios de mantenimiento de Carreteras continuaban ayer revisando el viaducto de A Valenzá, uno de los dos de la A-52 (el otro es el de Allariz) que tiene la misma técnica constructiva que el de Castro, en la A-6, que se derrumbó, al mismo tiempo que el Gobierno pidió ayer “tranquilidad” a todos los ciudadanos, asegurando que el sistema constructivo se ha utilizado “en todo el mundo” sin dar problemas.
En todo caso, estas operaciones de mantenimiento en el viaducto de A Valenzá han provocado que en la última semana, ayer también, permanezca al menos un carril cortado a la circulación para los trabajos de supervisión, lo que ha llamado la atención de los conductores. Ayer, eran al menos cinco los vehículos de mantenimiento que estaban en la vía haciendo la supervisión. Este periódico pidió información al respecto de estos trabajos al Ministerio de Transportes, sin recibir aún una respuesta.
SIN ALARMISMOS
Los puentes situados en A Valenzá y en Allariz en la A-52 son los únicos de la provincia construidos de la misma forma que el colapsado en la A-6: en el mismo periodo, por la misma empresa (FCC) y con el mismo modelo de construcción con piezas prefabricadas (vigas isostáticas con cables que las sustentan) que hoy ya no se utiliza.
La ministra de Transportes y Movilidad, Raquel Sánchez, apeló ayer en el Senado a la “tranquilidad” y defendió el sistema constructivo de dovelas prefabricadas que se utilizó en el viaducto colapsado de la A-6, intentando alejar fantasmas respecto a los clones, como los dos puentes ourensanos de la A-52. “Es un sistema aprobado, con miles de metros construidos en todo el mundo. Es la primera vez que ocurre algo así en España. Hay que dejar trabajar a los especialistas, los mejores especialistas del mundo”, señaló Sánchez en respuesta al PP, que pidió explicaciones en el Senado. “No lancen sospechas ni imagen de desatención, pido rigor”, insistió la ministra.
