El fotógrafo ourensano inaugura la muestra en el Banco de España.
Los músicos que participan en el Festival Internacional de Música Pórtico do Paraíso llegan, pasean por la ciudad, ensayan su concierto y, finalmente, deleitan al público con sus sonidos especiales traídos desde siglos atrás. Y esas distintas fases de una misma visita son las que ha captado con su objetivo el fotógrafo Mani Moretón y las muestra a los ourensanos, desde esta tarde, a las 20.30 horas, en el edificio del Banco España.
"Variacións Pórtico do Paraíso' se llama así porque en realidad son tres variaciones: la primera, el Festival; la segunda, un relato de Chesi titulado 'Viajero triste', y la tercera es la muestra 'Mene, Tequel, Upharsin", explica Mani Moretón.
El fotógrafo destaca que en esta muestra hay dos exposiciones diferentes, aunque relacionadas de alguna manera. "Cuando se estaba restaurando el Pórtico do Paraíso quedó durante unos días el andamio, y decidí subir a él a ourensanos de distintos ámbitos, así como a algunos músicos del Festival, para retratarlos al lado de la imagen del sonriente profeta Daniel. Esa era la única condición para la fotografía: los retratados debían sonreír. Y esa es la muestra "Mene, Tequel, Upharsin", subrayó.
La segunda muestra está centrada en los músicos participantes en el Festival. "La he dividido en tres partes: ensayos, paseos y conciertos. Considero indispensable ejercer la hospitalidad con quienes nos visitan, así que los acompaño. Selecciono entonces un lugar identificable de la ciudad y hago la fotografía, buscando siempre que estén en movimiento, que la imagen tenga ritmo. Después, está la parte de los ensayos, donde hay más cercanía y me permite hacer alguna gamberrada. Y finalmente, llegan las actuaciones. Aquí hay que ser muy discretos, porque el concierto es sagrado y no se puede molestar ni a los músicos, ni al público. El silencio no se puede romper, y eso hasta genera estrés", manifiesta Mani Moretón.
Para el fotógrafo su trabajo cumple además otra función: "Busco siempre que Ourense sea reconocible en las fotos, que se sepa dónde están. Después se envían las fotografías a los músicos de manera gratuita y sólo se les pide que identifiquen el Festival cuando las utilizan. Las reproducen en sus páginas y sirven de promoción a la ciudad, algo que creo que es muy importante".
Mani Moretón elige el sitio de la instantánea "siguiendo mi conocimiento, porque me gusta el sitio, y va también en función del número de componentes". Su exposición también rinde un pequeño homenaje al desaparecido Fernando Argenta. "Su fotografía en las escaleras busca un poco convertirlo en nota dentro de una escala musical".
