CRÓNICA

"Nós tamén somos Ourense"

Para los vecinos de los barrios las luces de Navidad son la última muestra de que el trato no es "igualitario" respecto al centro. La comparación de los adornos se suma al "abandono" de zonas verdes o falta de mantenimiento. 

La instalación de la luces de Navidad que el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, calificó como las "más extensivas", siguen sin convencer en los barrios. En los últimos días se ha ido extendiendo la colocación de la iluminación para esta época, lo que hace que algunos vecinos de la periferia mantengan la esperanza. Otros consideran que son "pocas" y algunos que ya "ni se acuerdan"de ellos. 

Esta situación agrava otros problemas con los que conviven los vecinos y comerciantes de los barrios ourensanos. En O Couto, Berta se queja de las luces de Navidad: "Decían que iban a llegar a todos los barrios pero al final se quedan en dos calles". Esta vecina aprovecha para señalar otros problemas con los que conviven por falta, explica, de mantenimiento municipal "Hay muy poca limpieza, antes teníamos las aceras limpias, además de algunos desperfectos que no se arreglan". Berta relata que, hace unos días, casi tiene un accidente al pasar por una zona dañada sin arreglar. 

El descontento es generalizado en O Couto. "Iban poñer más luces ca nunca e eu non notei moita diferenza", apunta Ángeles Rodríguez. Maribel Laso, otra vecina, prefiere que limpien más las calles: "Que poden los árboles, que en algunos sitios se meten hasta en las casas". Ambas consideran que solo preocupan los problemas del centro: "Nós tamén pagamos e merecemos o servizo", afirma Ángeles.

Los problemas pasan a A Carballeira, que también aquejan la falta de las luces de Navidad. "Que lle costaba poñer algo e que nos adornen o barrio, nós tamén somos Ourense", afirma Maricarmen Fernández, que confía en que en los próximos días coloquen alguna más. A pesar de ello, Maricamen aprecia que tienen otros problemas que son de todos los días: "O parque está fatal, parece totalmente abandonado e ninguén mira por él", destaca.

Las quejas se siguen extendiendo por zonas como San Francisco. "Todos los años nos ponían alguna luz y este año, de momento, nada. ¡Menos mal que iban a llegar a todos los barrios!", ironiza Lucía, una vecina que señala que los comerciantes están que "trinan". 

En Mariñamansa  y A Cuña la opinión de los vecinos no mejora. "En nuestra calle ya nunca han puesto ninguna, pero podían colocar alguna más en los barrios, que también pagamos", afirma Francisco González. 

Otros se dan por contentos: "En Vasco Díaz Tanco este año hay luces y nunca nos las ponían, por eso no tengo queja", explica María José Rivero. A pesar de ello, como barrio cree que hay falta de mantenimiento. "Todos los días tengo que pasar la escoba delante de mi negocio por culpa de las hojas", señala. En esta misma situación se encuentra Esperanza Rodríguez que suma los problemas con el servicio de limpieza municipal. "Aquí pouco limpan as aceras e a diario ando quitando eu as follas", comenta.


O Couto: "Así non se fai nada polo comercio local"


En la avenida de Portugal tiene Mónica Mosquera su tienda de ropa. "Puxéronnos poucas luces, así non se fai nada para promocionar o comercio local", afirma. Mónica cuenta que encendieron las luces en su calle el domingo. "Xuntámonos os comercios para poñer decoración na rúa e queda bonito co noso esforzo", explica. Además, se queja de los problemas de limpieza en las aceras. "Temos que barrer nós porque está sempre sucio", cuenta. 


Mariñamansa: "Nós tamén pagamos e non somos iguais"


Begoña Diéguez trabaja en Mariñamansa y hasta ayer, no notó más luces que en otros años. "Puxeron máis ou menos o mesmo, non parece que vaian por máis", explica. No lo ve correcto porque "tamén pagamos" y cree que debería ser más "igualitario" en toda la ciudad. En cuanto a la situación diaria de los barrios observa que el mantenimiento es menor. "Tivemos aquí diante un banco roto e tardaron meses en arranxalo", cuenta. 


A Carballeira: "O barrio está morto e non miran por el"


María del Carmen Fernández vive en A Carballeira desde hace 48 años y es testigo de su "decadencia". "Podían poñer algunhas luces máis para darlle vida a este barrio que está morto", afirma. La iluminación navideña acentúa la situación. "Case todas as vivendas están vacías, só queda xente maior, é unha pena como estamos", destaca. A sus quejas suma la falta de mantenimiento del parque.


As Lagoas: “Hai dous anos que non limpan a maleza"


Desde As Lagoas, Emilia Formoso explica los problemas del barrio, más allá de la poca iluminación navideña. "As luces dan alegría, pero o certo é que temos cousas máis urxentes", asegura. "Ao lado do noso edificio, na rúa Vasco da Ponte, temos unha parcela municipal que non limpan desde fai dous anos, en verán é perigoso polos lumes, sen falar dos bichos que pode haber", apunta.

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