Una de las víctimas durmió en un hotel al no poder abrir la puerta de su casa tras la huida de los ladrones
Los robos de dinero y joyas en viviendas ya parecen una constante. Los ladrones entraron ahora en una casa de Carballiño y en otra en Bóveda (Amoeiro), mientras los dueños estaban, los del primer municipio, asistiendo a un funeral, y los del segundo, participando en un concierto musical.
Los asaltos, al igual que la otra veintena registrados en viviendas de Barbadás, Monterrei, Verín, Catrelo do Val, Esgos, Allariz y Trasmiras, se produjeron al caer la luz del día. Antonio F.M. es la víctima del robo en Bóbeda (Amoeiro) y recuerda que salieron de la casa sobre las seis de la tarde para acudir a la actuación musical. "Cuando llegamos, un par de horas después, ya encontramos la casa toda revuelta", comento.
Los delincuentes forzaron la puerta de un balcón y, una vez dentro del inmueble, se llevaron joyas y un reloj, que el propietario no es capaz de cuantificar. "Las joyas eran de mucho valor, sobre todo sentimental, porque marcharon con unos pendientes de mi hija que ya eran de su abuela", añadió.
La vivienda asaltada en la tarde del pasado día 12 en el centro de Carballiño es del octogenario José E.G., que, junto con su esposa, tuvo que pasar la noche en un hotel al no poder abrir la puerta después de que se marcharan los ladrones y, al ser de noche, no encontrar un cerrajero para cambiar la cerradura de la puerta, que fue forzada.
El matrimonio había acudido sobre las cinco de la tarde a un funeral y al regresar, hora y media más tarde, se encontró la puerta cerrada. Intentaron abrirla, pero pronto se percataron de que alguien había estado allí, que la llave no abría. La vivienda está dotada de sistema de alarma, pero José E.G. no la había conectado. "Creo que nos estaban vigilando", lamentó la víctima. Sustrajeron joyas por valor de 6.000 euros.
La Guardia Civil mantiene operativo un dispositivo de vigilancia con el objetivo de detener a los ladrones, que se desplazan por toda la provincia.
